25.02.2015 - 22:02 /

Geopolítica de China: economía, ideología y geoestrategia

Internacional | Por - Damián Jacubovich analista internacional




En poco más de dos años y en un marco de continuidad, el nuevo presidente chino Xi Jinping parece haber dejado claro cuáles son los principales pilares de su gestión: economía, ideología y geoestrategia.

En el plano económico, después de 25 años, China volvió a la “modesta” tasa de crecimiento de 7%.Hasta hace unos 3 años China se encontraba en un 14%. Si bien una de las razones de la disminución reside en la prolongada crisis financiera que azota a Europa,es necesario subrayar un cambio de estrategia, es decir, un crecimiento que priorice la calidad, eliminando los excesos de capacidad, prestando atención a las dimensiones ambientales, sociales y tecnológicas. Es lo que los funcionarios chinos llaman “pasar del made in China al createdbyChina. Solo así Pekín puede aspirar a convertirse en un país desarrollado y avanzado”.

En el plano ideológico, el actual gobierno sabe bien que gran parte de la supervivencia del régimen dependerá de cómo logra regular la influencia occidental en su territorio. Esto implica tanto la regulación de los medios de comunicación sobre todo Internet como así también el eje educativo, con un mayor control en lo que sucede en las Universidades (vigilancia sobre los textos y la no difamación de los líderes del Partido en las aulas). Finalmente siempre en el plano ideológico, la campaña anticorrupción parece ser una de las puntas de lanza de una estrategia que pretende renovar las bases de la legitimidad del Partido Comunista Chino.

Por último, en el marco de la geoestrategia y la diplomacia, las relaciones de vecindad se han convertido en uno de los principales ejes de la política exterior china. China parece tener muy claro sus ambiciones: acrecentar su influencia en región Asia Pacífico, más específicamente en el plano oceánico y marítimo. En los últimos años, China viene realizando grandes movimientos militares navales, estas y otras maniobras militaresimplican tanto una demostración de fuerza militar como una gran oportunidad comunicacional, lo que en el idioma de las relaciones internacionales se denomina poder de disuasión. Japón resulta sin dudas, el gran destinatario del mensaje militar chino. Las relaciones entre ambos países vienen siendo cada vez más tensas; ésto, debido a litigios territoriales marítimos empantanados en toda una historia de desencuentros entre ambos pueblos. Durante los últimos años, las diferencias en capacidad armamentística entre Japón y China se han acrecentado fuertemente a favor de este último; razón por la cual a Tokio se le ha hecho cada vez más vital, consolidar la alianza militar con el bloque occidental encabezado por EE UU.También se debe señalar que China mantiene litigios territoriales con Filipinas y Vietnam. La región Asia Pacífico se ha transformado en el nuevo punto caliente de la geopolítica mundial. Esta porción del planeta ha desplazado ni más ni menos que a Oriente Medio como principal centro de operaciones militares del bloque estadounidense. Es la zona donde existe la mayor cantidad de hipótesis de conflictos bélicos serios entre países, por afuera de la caza global al terrorismo. Respecto a este tema, China afronta serias tensiones étnico-religiosas que persisten y se agravan por ejemplo en el Tibet o Xinjiang, dos exponentes claros, especialmente en este último caso por las conexiones terroristas.

Por - Damián Jacubovich analista internacional