12.05.2015 / Fugas en el Frente Renovador

Massa sufre el goteo de dirigentes

Intendentes, candidatos a gobernadores, legisladores bonaerenses, peronistas disidentes fueron abandonando paulatinamente el armado que el tigrense construyó en 2013.

por Facundo Matos




Desde fines de 2013, después de ganarle a Martín Insaurralde en la provincia de Buenos Aires, Sergio Massa fue viendo cómo el Frente Renovador que acababa de construir fue perdiendo su fuerza.

Con dificultades para lograr un armado nacional, sin un discurso preciso y relegado finalmente al tercer puesto en las encuestas, el frente massista sufrió el éxodo de varios intendentes, gobernadores aliados, legisladores bonaerenses y otros dirigentes que en un principio lo habían acompañado.

Intendentes

Cuando el Frente Renovador se lanzó en 2013, eran 22 los jefes comunales que conformaron la liga de intendentes massistas.
De ellos, el primero en irse fue el de San Isidro, Gustavo Posse. Tras pasarse del PRO al Frente Renovador en 2013, ante la caída de Massa en las encuestas, decidió volver al macrismo, aunque lo hizo aliado a través de un partido que creó, el Espacio Abierto. Allí precisamente, recaló el segundo intendente que perdió Massa, Carlos Oreste, de Coronel Pringles.

Luego le siguió el de Escobar, Sandro Guzmán, quien decidió regresar al Frente para la Victoria (FpV), partido que había abandonado también en 2013. En la última semana, en tanto, se sumó Jesús Cariglino, el intendente de Malvinas Argentinas que pasaría al PRO, y Darío Giustozzi, ex jefe comunal de Almirante Brown, que volvería al FpV.

En las legislativas 2013, la lista para diputados nacionales encabezada por Sergio Massa sacó 560.000 votos en los cuatro distritos agregados. Si se le suman las 94.000 personas que votaron al Frente Renovador en Vicente López (cuando el massismo estaba aliado a Jorge Macri, intendente del distrito y primo del líder PRO), el total sube a los 650.000.

Si bien ni en ese momento eran todos potenciales votantes de Massa ni ahora lo han dejado de ser, el número ilustra una situación en la que se encuentra el ex jefe municipal de Tigre: debe retener 650.000 votantes y lo debe hacer sin la tracción de votos que otorgan los intendentes, que ya no responden a él.



Gobernadores y candidatos

Fueron la gran limitación de Sergio Massa desde el primer momento. Como el PRO y a diferencia del peronismo y el radicalismo, el Frente Renovador careció siempre de una estructura nacional y candidatos competitivos en cada una de las provincias. Por eso, la estrategia del tigrense -al igual que la del macrismo- fue la de cooptar radicales a lo largo y ancho del país. 

Sin embargo, Mauricio Macri tuvo más éxito en esta búsqueda y al sellar un acuerdo con la UCR, logró encolumnar a la mayoría de los candidatos a gobernadores radicales.

Massa, en cambio, corre el riesgo de perder el apoyo del tucumano José Cano y el jujeño Gerardo Morales. El 14 de marzo, los dos dirigentes radicales llegaron a la Convención Nacional de la UCR siendo partidarios de una primaria amplia que les permitiera apoyar tanto a Massa como a Macri, pero al imponerse el acuerdo reducido únicamente al PRO, acataron la decisión del órgano partidario.

El tigrense mantiene el apoyo del gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, y del chubutense Mario Das Neves. Sin embargo, Das Neves anunció recientemente que su boleta irá tanto con la de Massa como con la de Scioli.



Legisladores provinciales

Con su triunfo en la provincia de Buenos Aires hace dos años, el Frente Renovador logró conformar un bloque de 21 diputados bonaerenses y 19 senadores provinciales.

En el Senado bonaerense, fueron cuatro los que se fueron. El primero fue  Mariano San Pedro, que abandonó el massismo para pasar al kirchnerismo, a fines de 2014. Luego, este año el Frente Renovador perdió al ex edil de Avellaneda, Baldomero Cacho Alvarez y a Alfonso Coll Areco, quienes también pegaron el salto al FpV.

Más tarde, con la salida de Jesús Cariglino se produjo la fuga de su hermano, el senador bonaerense Roque Cariglino, y cuando Giustozzi se separó del massismo, también lo hizo Patricia Segovia.

En tanto, en Diputados, el primero en pegar el portazo fue Orlando Yans, en 2014, para recalar en el PRO. Luego, le siguió Mario Giacobbe, quien siguió el ejemplo de Giustozzi y ahora podría recalar en el FpV o formar un bloque aparte.

Dirigentes

Otros políticos sin cargos institucionales también abandonaron el massismo. Así sucedió con el ex fiscal federal Pablo Lanusse, quien ayudaba a Massa en la elaboración de proyectos para mejorar la transparencia del Estado y la institucionalidad, y con el ex diputado peronista Eduardo Amadeo, quien saltó al macrismo ante el declive de Massa.

Sindicalistas

En tanto, dos ejes centrales del proyecto massista –como son los sindicalistas opositores y los empresarios- no lo abandonaron del todo, pero tampoco terminaron por aceptarlo completamente.

"Cuando surge su candidatura en 2013, la idea de Massa era en parte la de recrear desde el Frente Renovador el pacto social de gremios y empresarios”, describe el periodista Diego Genoud, autor de la biografía no autorizada del líder del Frente Renovador, en una entrevista con el estadista. “Pero evidentemente hubo un cortocircuito, una desconfianza mutua entre el massismo, que no se terminó de comprometer con los gremialistas y los sindicalistas, que no quisieron firmarle un cheque en blanco”, analiza.

Massa soñaba con lograr el apoyo del líder de la CGT, Hugo Moyano, y por un momento casi lo logra. Su nexo con el camionero es su hijo, Facundo Moyano, quien desde agosto de 2014 forma parte del bloque de diputados nacionales del Frente Renovador.

En diciembre pasado, en la fiesta de fin de año de afiliados al Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes y Afines (SUTPA), Facundo Moyano logró lo que Massa buscaba: que el líder camionero y el precandidato presidencial compartieran una foto y avanzaran en la negociación de un acuerdo de cara a las elecciones.



Sin embargo, la fugaz alianza no duró. Facundo Moyano sigue en el bloque renovador, pero su padre acentúa los gestos hacia el líder del PRO, Mauricio Macri, y tiende puentes a uno y otro lado del mundo político. Omar Viviani, líder del sindicato de taxistas y hombre cercano suyo en la CGT, manifestó su acompañamiento a la candidatura de Daniel Scioli, mientras que Amadeo Genta (municipales porteños), es el nexo entre el camionero y Macri.

Empresarios

Por su parte, sobre la relación con el empresariado, Genoud describe: “Lo usaron para ponerle freno al kirchnerismo en 2013 pero después optaron por levantar a Macri, lo que se conjugó con una orientación social en el mismo tiempo de un sector del electorado que pasó de uno a otro, del 'hay que votar a Massa para frenar al kirchnerismo' de 2013 al 'Massa es demasiado parecido al kirchnerismo' de ahora".

"Hoy los empresarios le insisten con que se junte con Macri como candidato a gobernador. Porque en el empresariado también hay miedo a que sea como un Néstor (Kirchner) joven. Ven que se comió de un bocado a Néstor y Cristina y eso hace que tomen recaudos”. “El empresariado no lo compró como él hubiese querido”, asegura.