A casi 4 meses de haber modificado la política de viajes oficiales quitando la obligación a funcionarios nacionales de utilizar la línea de bandera con el objetivo de conseguir "las vías más cortas y de menor costo" y con la flota oficial en desuso,
el presidente Mauricio Macri optó un vuelo común para viajar a España junto con su mujer, Juliana Awada, pero de la compañía española Iberia.
De esta manera, y a la espera de adquirir nuevos aviones para la flota oficial con un costo multimillonario, el jefe de Estado eligió, justamente y una vez más, una aerolínea extranjera para volar al exterior en lugar de Aerolíneas Argentinas y, además, con el agravante de que
se trata de la empresa que fundió la aerolínea de bandera nacional.
Según confirmaron a la agencia DyN fuentes de la Casa Rosada, Macri partió anoche rumbo a Madrid, en un vuelo de línea española, y hoy comenzará una visita de tres días con reuniones con los reyes de España, su par Mariano Rajoy, parlamentarios y empresarios, con el eje puesto en la búsqueda de inversiones y la profundización del intercambio comercial.
Curiosamente, tanto en el comunicado que emitió Presidencia como en la foto oficial, en ningún momento se informó la empresa aérea por la cual voló Macri con Awada.
