El Gobierno de los Estados Unidos aplicó un fuerte incremento en los aranceles a la importación del biodiésel argentino en una medida que pondrá un freno a los embarques hacia el país del norte. La decisión del departamento de Comercio llega días después de que el vicepresidente Mike Pence visite el país y se reúna con Mauricio Macri.
Los aranceles aplicados al biodiésel argentino se centraban en el 4,5% pero tras esta determinación el porcentual escalará a un intervalo entre el 50,29% y el 64,17% en una clara medida proteccionista iniciada por la National Biodiésel Board (NBB) quien reclamó que el biodiésel argentino "tiene subsidios".
En la reunión que el segundo de Donald Trump mantuvo con Macri en Argentina se definió que la medida de dumping se postergaría hasta octubre. Además, luego de ese encuentro la propia Casa Blanca afirmó en un comunicado que Argentina abría su mercado para la importación de carne de cerdo y ellos a su vez lo abrían para los limones.
El enojo en el Gobierno de Mauricio Macri no tardó en llegar y fue el senador Federico Pinedo quien levantó la voz por la medida de la administración Trump.
El presidente provisional de la cámara alta calificó de "lametable" al "proteccionismo basado en el miedo al diferente, al otro, al inmigrante, al comercio".
El ministro de Producción de Santa Fe, Luis Contigiani manifestó que en su provincia la producción de biodiésel "representa un 80% a nivel nacional". En la misma línea aclaró que
“esta medida va a frenar fuertemente a una industria que venía creciendo y que va a frenar la producción y el empleo”.
“Los liberales creen que el mundo gira en torno al libre comercio pero el mundo está muy lejos de esa teoría. Con EEUU debe negociarse como bloque regional, no de manera directa”, señaló en diálogo con Radio 10.
Por último explicó que “EEUU representa el 90% de nuestras exportaciones de biodiésel, por eso no tenemos un sustituto", y que “los informes más optimistas dicen que a fin de año recuperaríamos el 3%, lo que nos remonta a diciembre de 2015".
