Mauricio Macri se reunió en secreto con Jorge Sampaoli, entrenador de la Selección Argentina, para interiorizarse sobre la logística y preparación del seleccionado nacional de cara al Mundial de Rusia. El Presidente comentó acerca de
la creación de la Casa Argentina en Moscú donde espera poder contar con la presencia de los principales jugadores y del astro Leonel Messi.
La idea de la Casa Argentina en Moscu surgió en el foro económico de Davos donde Macri utilizó dicha sede para reunirse con la canciller alemana Angela Merkel y Bill Gates entre empanadas, alfajores y vino argentino.
El Presidente se comprometió a estar presente en la inauguración del Mundial y en los dos primeros partidos de Argentina en fase de grupos ante Islandia y Croacia.
"El Presidente pidió verlo. Hablaron durante dos horas, sólo de fútbol. Ni de política, ni del país", explicaron desde el entorno del entrenador al diario Clarín. Como se mencionó anteriormente no se habló de política, ni de las Sociedades Anónimas Deportivas, ni de la AFA,
Macri quería saber de Messi y como estaba el mejor jugador del mundo en el Siglo XXI.
Macri se puso a disposición del seleccionado en todo lo que precisen en el Mundial, Mauricio sabe que el último presidente que estuvo en una copa del mundo fue Carlos Saúl Menem en Italia 90. Argentina perdió con Camerún en el debut y el mote de mufa en resultados deportivos lo acompaño toda su gestión, el expresidente de Boca muestra un pergamino triunfante en el fútbol y se lo nota muy entusiasmado con un resultado positivo en Rusia.
Por último,
desde la secretería de la Presidencia negaron cualquier tipo de consulta de parte de Macri sobre una posible convocatoria de Carlos Alberto Tévez. "De ninguna manera. ¿Cómo le va a pedir por un jugador? Mauricio es el Presidente. No se mete en esas cosas", aseguraron. De todos modos el lobby mediático ya empezó.
