En la noche del miércoles una enorme cantidad de argentinos ubicados en distintos puntos del país salieron a hacer un ruidazo con bocinas y cacerolas para reclamarle al Gobierno de Mauricio Macri que revea los aumentos indiscriminados en las tarifas de los servicios públicos. La respuesta de los distintos funcionarios y allegados a Cambiemos reafirma sus políticas y redobla la apuesta con criticas a los ciudadanos.
"Debe haber gente que reclama legítimamente y gente que usa esto desde un lugar político", sostuvo Guillermo Dietrich en una entrevista con TN y agregó que "a mucha gente le cuesta y mucho, pero la mayoría de ellos sabe que no hay otro camino. Algo que cuesta no puede ser gratis, porque saben y vivían los cortes de la electricidad que sufríamos".
El ministro consideró que la gente exprese su opinión "es algo bueno", pero agregó que
"no hay nadie que diga 'yo quiero que me aumente la tarifa'. Eso está claro. Pero estuve en muchos lugares en la Ciudad y en el Conurbano, y la mayoría de la gente tiene esperanza. Nos dijeron que 'vamos bien'".
En la misma línea dio una particular visión al declarar que "a veces la verdad cuesta y duele", insistiendo con que para el Gobierno "es difícil saber el impacto que tiene en la gente" cuando uno actualiza las tarifas. Sobre los reclamos opositores:
"Siempre estaremos abiertos a cualquier propuesta bien intencionada, no la chicana política de aquellos que necesitan que nos vaya mal".
Uno que no tuvo filtro para declarar fue el extitular del Plan Belgrano José Cano en diálogo con FM La Patriada: "Algunos dicen ‘me aumentaron el 100% las tarifas. Y, claro, si vivís en un departamento en Avenida del Libertador...”.
