El jefe de los espías,
Gustavo Arribas, hizo oídos sordos a la orden Presidencial y se lo vió en el debut de la Selección argentina.
Mauricio Macri le había ordenado a sus funcionarios no ir a Rusia para dar una imagen de austeridad en medio de la crisis económica. Sin embargo, el titular de la Agencia Federal de Inteligencia no se quiso perder el primer partido.
"El Presidente, los ministros,y demás funcionarios no pueden mostrarse en Rusia en medio de la crisis económica y del esfuerzo que le estamos pidiendo a la gente", dijeron desde Casa Rosada a La Nación en mayo. La orden duró poco y la primera foto que se difundió fue la de Arribas.
El periodista Iván Schargrodsky publicó
una foto del funcionario dentro del estadio, en el partido que disputó la Argentina contra Islandia, el cual terminó con un empate.
Arribas fue, además, agente de futbolistas y representante de deportistas. Sus contratos más destacados, indicó La Nación hace meses, fueron los de
Carlos Tevez y Cristian Pavón, delanteros de Boca Juniors. El último jugó hoy en Rusia. También tiene una relación con Daniel Angelici y
su nombre apareció en los Panamá Papers por la vinculación de Fernando Hidalgo, su socio, con operaciones realizadas por la sociedad Top Players Agency Corp entre 2007 y 2013.
