La flamante cúpula de la CGT se reunió ayer en la sede de Azopardo y avanzó hacia “medidas de acción directa”, según anunciaron tras el encuentro, ante la falta de respuesta por parte del gobierno de Mauricio Macri a los reclamos de la central obrera, fundamentalmente por la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores.
“Económica y políticamente estamos atravesando por momentos muy complicados porque no se ven soluciones en el corto ni en el mediano plazo”, sostuvo Héctor Daer, miembro del triunvirato al frente de la CGT, al término de la reunión.
En el cónclave se decidió que el Comité Central Confederal del próximo 23 de setiembre facultará al Consejo Directivo de la CGT para que adopte "las medidas de acción directa" que considere necesarias, ante la falta de respuestas de la Casa Rosada. Recién en ese encuentro podría ponerse fecha a un paro, medida todavía no confirmada.
Durante esta mañana, en tanto, las dos CTA serán recibidas en el Ministerio de Trabajo, instancia por la que ya pasó la CGT, sin demasiado éxito. La reapertura de las negociaciones paritarias, uno de los principales pedidos por ambos sectores sindicales, ya fue rechazada por el Gobierno.
