16.03.2017 / PERSECUCIÓN A LOS DOCENTES

Vidal mandó a la Policía Bonaerense a las escuelas para pedir nombre y filiación de quienes pararon

Escuelas de La Matanza y Benito Juárez advierten que el Gobierno bonaerense ordenó a la policía ingresar a los establecimientos educativos para identificar a quienes adhirieron al reclamo sindical. “Hay plata para rompehuelgas pero no para salarios”, denuncian.



El Gobierno bonaerense ordenó a la policía que ingrese a las escuelas de la provincia y exija a las autoridades de cada establecimiento educativo nombre, apellido y filiación de  los docentes que decidieron manifestarse en reclamo de una mejora salarial digna. Dos escuelas de la Matanza y una de Benito Juárez ya presentaron denuncias por “amedrentamiento y amenazas”.

El paro por 48 horas fue convocado por el Frente Gremial Docente, tras el rechazo del Ejecutivo de María Eugenia Vidal de considerar el reclamo de un aumento salarial del 35 por ciento. “Hay plata para los rompehuelgas, pero no para los salarios”, denunciaron los docentes.

Paulino Guarido, secretario general de CTA-La Matanza, contó a Página 12 que “la Bonaerense se presentó para hacer preguntas inapropiadas por el no dictado de clases y las características del paro”.” Lo tomamos como una medida de amedrentamiento y amenazas”, sentenció el gremialista.

El Consejo General de La Matanza, junto con ATE y la CTA, denunciarán además a las jefaturas de los distritos que autorizaron el ingreso a las escuelas de funcionarios de los ministerios de Seguridad y de Trabajo provinciales. Según el documento al que pudo acceder PáginaI12, denunciarán que fueron para “controlar, intimidar y pedir el listado de los docentes ausentes”.

La secretaria gremial de SUTEBA, María Laura Torre, aseguró que fue el propio Gobierno que dio la indicación a las fuerzas de seguridad, de apersonarse en los establecimientos: “Llegaron con una nota de la Dirección General de Escuelas que los autorizaba a entrar para pedir la lista de los docentes que estaban parando”, contó.

En una escuela de Villa Cacique, de Benito Juárez, sucedió una situación similar. Los policías entraron con una nota dirigida al director, en la que le exigían que informara “la cantidad de personal que se encuentra trabajando en el establecimiento, como así también datos filiatorios de los mismos y tareas que realiza”.