La toma del Consejo Nacional de las Mujeres está por cumplir 24 horas. Comenzó ayer luego de que Karina Abregú, sobreviviente de un intento de femicidio, denunciara irregularidades e incumplimientos por parte del ente en el otorgamiento de subsidios y medicamentos. Esta mañana dos representantes del organismo presidido por Fabiana Túñez –quien no se encuentra en el país- acompañaron a la denunciante a la sede de Desarrollo Social para intentar destrabar el conflicto. Luego, las organizaciones que la acompañan definirán en asamblea cómo seguir.
“Todavía estamos acá. Karina se fue con un grupo de compañeras y dos autoridades a Desarrollo Social a ver si podían efectivizar el subsidio por única vez. Si eso ocurre vamos a ver cómo sigue la medida, pero sigue faltando la medicación: le habían dado una tarjeta pero tuvo problemas para usarla”, explicó Carolina Abregú, hermana de la víctima y referente de Defensorías de Género, en diálogo con Política Argentina. Junto a ella, una decena de representantes de distintas agrupaciones –como la Asamblea Lésbica Permanente y el Colectivo Lohana Berkins- permanecían tomando el piso nueve del edificio del Consejo, donde no se veía personal trabajando pero sí efectivos policiales rodeando a las manifestantes.
Las mujeres denunciaron que durante la madrugada fueron amedrentadas por personal policial: “Tuvimos situaciones violentas. Compañeras que necesitaban salir a comprar algo y salían con la promesa de volver a entrar y después no las dejaban”. Antes de la toma, Karina y las referentes que la acompañan intentaron hacerle llegar el reclamo a Túñez, sin éxito.
“En ningún momento se comunicó. Hace 48 horas estamos llamando a Túñez, desde que comenzaron los problemas con el acta acuerdo”, señaló Carolina.
La semana pasada la organización acompañó a Karina Abregú para solicitar ayuda al Consejo. Tras cortar la calle, lograron una reunión donde
el organismo se comprometió a otorgarle un subsidio inmediato a la mujer, que fue quemada por su entonces pareja. Además, le dieron tarjetas para comprar alimentos y los 13 medicamentos que necesita por las lesiones que le quedaron tras el intento de femicidio por parte de Gustavo Albornoz. El lunes 13 se le entregaron unas tarjetas para alimentos.
Sin embargo, la hermana de Abregú, Carolina Abregú, aseguró a Nueva Ciudad que los cupos “decían Desarrollo Social” y que cuando el hijo de Karina se presentó a comprar alimentos con dichas tarjetas fue “demorado”. “Dijeron que esas tarjetas sirven sólo para usar en la Ciudad de Buenos Aires y él las quiso usar en Provincia, por eso quedó demorado. Si son apócrifas o no, nosotros no sabemos”, dijo a Cosecha Roja.
También “se comprometieron a cubrir la mediación y no se la dieron y el subsidio que sería inmediato ahora tardaría 45 días”, denunció. Y agregó:
“Lo que se habló en la mesa fueron promesas y no cumplieron. Por eso vinimos de forma pacífica y tampoco nos dieron respuestas, al contrario llenaron de policías la puerta. Se vivieron momentos de tensión porque la gente dentro del edificio pensaban que no podían salir por nosotras pero era una orden interna”, explicó Carolina. La violencia aumentó cuando llegaron “tres policías de civil y uno de ellos violento a Karina. Pero pudimos entrar y tomar el piso 9. No nos vamos sin respuestas”, concluyó Carolina Abregú.
