El Congreso avanza en la sanción de la ley que busca retrotraer y frenar los tarifazos del Gobierno. Si bien aún continúan las negociaciones y el oficialismo aspira a presionar a los Gobernadores para que el proyecto no se apruebe, no descartan que ésto suceda y el Presidente ya tiene preparado el veto. Pero,
¿qué pasa luego del veto presidencial? ¿el Congreso puede insistir con la ley?
La Constitución plantea que si el Presidente veta una ley, la misma volverá al Congreso y si en ambas cámaras obtiene los dos tercios de los votos a favor de la normativa vetada, el Jefe de Estado deberá promulgarla aunque no esté de acuerdo. Sin embargo, desde que volvió la democracia, sólo en 36 oportunidades el Congreso aprobó una ley que había sido vetada previamente
Una vez aprobada una ley en el Congreso, el Presidente tiene dos caminos: aprobar y promulgar la ley, lo que finaliza el proceso legislativo, la normativa se publica luego en el Boletín Oficial y entra en vigencia de acuerdo con los plazos legales. Pero
también puede vetar la ley de forma total o parcial. En caso de veto parcial, puede promulgar parcialmente la parte no vetada cuando no desvirtúe el espíritu del proyecto sancionado por el Congreso.
Si el Presidente veta totalmente la ley, el proyecto vuelve al Congreso, que puede aceptar o rechazar ese veto. Si ambas cámaras cuentan con dos tercios de los votos para imponer su criterio inicial, la ley se promulga, aunque el presidente no esté de acuerdo. Si no lo consiguen, se mantiene el veto del presidente y el proyecto no puede volver a tratarse en las sesiones de ese año, tal como lo detalla la
Constitución en su artículo 83.
Sin embargo, ésta no es una práctica habitual. Según un sondeo del sitio El Parlamentario, en base a un relevamiento del Centro de Estudios Nueva Mayoría,
desde el regreso de la democracia solo en 36 oportunidades el Congreso aprobó una ley que había sido vetada previamente.
