La precandidata a presidenta de la Coalición Cívica dentro del frente Cambiemos, Elisa Carrió, aseguró "hoy termina" su "misión" y que
"la verdad de la Nación va a salir a borbotones". Así lo afirmó en declaraciones a la prensa que formuló luego de emitir su voto en el marco de las PASO nacionales en la mesa 777 de la escuela número 3 Onésimo Leguizamón, ubicada en la avenida Santa Fe al 1500 del barrio porteño de Recoleta.
"Yo no compito con nadie. Yo trasciendo las elecciones; soy una atracción turística nacional", aseveró la diputada nacional, líder de la Coalición Cívica y precandidata presidencial dentro del frente Cambiemos.
Además, en el breve diálogo que mantuvo con los periodistas, Carrió se autodefinió como
"una obrera de la causa de la justicia y la verdad" y sostuvo que "el destino de los argentinos es mucho más que un candidato".
Por otro lado, cuando fue consultada sobre sus expectativas en relación a la candidatura presidencial de Cambienos -en cuya interna Carrió compite con el líder del PRO, Mauricio
Macri, y el radical Ernesto Sanz- la diputada afirmó que estará "en el medio o al lado".
La precandidata a presidente se mostró irónica tras su paso por el cuarto oscuro y, en un momento de su contacto con los periodistas, sacó unos anteojos de cotillón con brillos y el número 60, se los puso y, entre risas, dijo que a los 60, ella está "divina".
Sin embargo, recién el año próximo, el 26 de diciembre, será el día en que la diputada nacional y líder de la Coalición Cívica cumplirá 60 años.
"Esto es para Cristobal Lopez que me mira por TV", declaró Carrió.
"Yo no soy radical, soy de cuna, soy paladar negro, soy fundadora de la coalición Cívica, tuve un marido peronista y tengo hijos mitad y mitad, pero gracias a Dios no sacaron la herencia de Aníbal Fernández", disparó.
