10.01.2017 / CRÍMENES DE LESA HUMANIDAD

Suspendieron el juicio a gerentes de Ford por el secuestro y tortura de 24 obreros en dictadura

En una nueva dilación del juzgamiento a los responsables civiles del terrorismo de Estado, la Justicia suspendió por tiempo indefinido el inicio del juicio a dos ex gerentes de Ford. Dentro de la fábrica que manejaron en General Pacheco funcionó un centro clandestino.




El Tribunal Oral Federal 1 de San Martín dejó "sin efecto" la audiencia prevista para el 14 de marzo próximo en el juicio a dos ex gerentes de la firma automotriz Ford en General Pacheco y a un ex jefe militar por el secuestro y las torturas a 24 trabajadores durante la última dictadura cívico-militar. Incluso, algunos de estos crímenes de lesa humanidad ocurrieron dentro de las instalaciones de la fábrica, en un quincho que funcionó como centro clandestino. Para el inicio del juicio, largamente postergado, no se determinó una nueva fecha.

En la resolución que informó la suspensión, con las firmas de la jueza Marta Isabel Milloc y el juez Diego Gustavo Barroetaveña, se argumentó que se debe a "la prolongación" del juicio en curso en la causa “Colegio Militar”, que tiene audiencias fijadas hasta por lo menos el 16 de marzo. Según informó el Ministerio Público Fiscal, la medida fue emitida el 29 de diciembre y notificada el 6 de enero a la Fiscalía General, a cargo de Marcelo García Berro.

El juicio, que los querellantes aguardan y reclaman hace años, tiene como acusados al ex gerente de Manufactura de la firma, Pedro Müller (85 años), al ex jefe de Seguridad de la planta de la automotriz en General Pacheco, Héctor Francisco Sibilla (90), y al ex jefe del Cuerpo IV del Ejército, Santiago Omar Riveros (94), por los crímenes cometidos contra 24 trabajadores de la firma en la planta de General Pacheco.

En medio de las postergaciones, ya falleció uno de los imputados, sin llegar al banquillo de los acusados: se trata del ex gerente de Relaciones Institucionales, Guillermo Gallarraga, quien falleció en junio a los 93 años.

Además de ser un caso emblemático de participación civil y empresarial en crímenes de lesa humanidad, el caso de Ford tiene como particularidad el funcionamiento de un centro clandestino de detención dentro del predio fabril, en un quincho que fue lugar de reunión y esparcimiento de los trabajadores.

La denuncia que dio origen a la causa penal fue formulada en 2002 por el fiscal Félix Crous, luego de escuchar en el Juicio por la Verdad que tramita ante la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata el testimonio del trabajador sobreviviente Pedro Troiani, uno de los impulsores que busca Justicia.