El oficialismo logró que se apruebe su propuesta de acuerdo con los holdouts. La medida contó con 54 votos a favor y 16 en contra. De esa manera, se podrá cancelar la deuda con los bonistas que no ingresaron a los canjes de 2005 y 2010. Especialistas mostraron preocupación por la manera en que se llevó adelante y las consecuencias de esta aprobación.
En este marco el ex ministro de Economía y actual diputado nacional, Axel Kicillof, explicó que muchos de los votos en el Congreso que obtuvo el proyecto oficial para el pago a holdouts "se compraron con (promesa de) obra pública y asistencia a las provincias".
"Algunos diputados o senadores recibieron llamados de sus gobernadores diciéndoles que tenían que acompañar el proyecto de (Mauricio) Macri. Pero no por convicción, o por acompañamiento, sino que era una condición para asistir financieramente a las provincias y darle obras públicas”, expresó y añadió:
“Es decir, los votos se compraron con obra pública y asistencia a las provincias”.
En declaraciones a radio Del Plata, el legislador calificó la situación como de "apriete y extorsión", e insistió con que "no fue una votación limpia".
"Esto es una vergüenza, porque con ese criterio, cualquier proyecto del Poder Ejecutivo también puede ser votado a favor de esa manera", concluyó.