Una de las dos monjas del convento de General Rodríguez delcaró hoy ante el juez federal Daniel Rafecas que en la noche del 14 de junio la madre Alba, superiora en el convento de General Rodríguez le había pedido que estuviera "atenta al portón" porque esa noche "iba a ir José" López.
Para evitar que se filtre información, Daniel Rafecas impartió “expresas directivas” al subcomisario Diego De la Fuente, encargado de la seguridad de los tribunales federales porteños, de "blindar" el piso donde se encuentra su despacho y donde recibirá a las monjas.
También se dispuso una escolta para las monjas “desde el ingreso al predio hasta el ingreso a las instalaciones del juzgado procediendo de idéntica forma al salir del mismo”.