El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, volvió hoy a atribuir el "acatamiento muy importante" que en la ciudad de Buenos Aires tuvo el paro general a la adhesión del transporte, y reiteró que el del jueves "fue un día perdido". Además, opinó que la medida de fuerza no tuvo una "consigna clara".
"Tampoco fue un paro en función de que se cortó el diálogo; el paro es la última instancia de la discusión, pero nosotros estamos trabajando en mesas de diálogo con los distintos gremios", contó.
Frigerio planteó que si bien la dirigencia sindical ahora reclama cambios en el rumbo económico, "no les gustaba tampoco el modelo anterior". Para el funcionario nacional, "la mayoría" de los argentinos "acompaña" al Gobierno y a sus políticas públicas.
Frigerio atribuyó además, las recientes manifestaciones en contra del Gobierno, a que "no es fácil, sino más bien difícil la transición de la Argentina del pasado a la Argentina que tiene que ser" y aseguró que las autoridades van a seguir acompañando "a los sectores de la producción" y a la franja de la población "más vulnerable".
