08.06.2018 / Antecedente peligroso

Argentina vuelve al Fondo: cuál fue el mensaje del FMI a Grecia en 2010 y qué pasó luego con los helenos

El anuncio por parte del Gobierno de la concreción de un acuerdo stand by de alto acceso con el Fondo por USD 50 mil millones tiene un espejo en el caso griego. "Proteger a los pobres", al igual que en el pacto de Macri, era el mensaje, pero el resultado fue desocupación, desplome del PBI, los salarios, las jubilaciones e incluso suicidios. Los detalles.



"Como parte de este apoyo, tanto el FMI como el gobierno argentino tienen la intención de trabajar juntos para garantizar que se tomen medidas, y que los recursos estén plenamente disponibles, para proteger a los más vulnerables de la población a medida que avanzan las reformas económicas", dijo ayer la titular del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, en el comunicado en el que anunció que el acuerdo stand by de alto acceso entre el organismo y la Argentina por USD 50 mil millones ya estaba cerrado.



Sin embargo, lo que el presidente Mauricio Macri había calificado horas antes como un "gran acuerdo para los argentinos" tiene un antecedente que deja algunas dudas: en mayo de 2010, el FMI abrió con Grecia un programa similar al que ahora suscribió la Argentina, también con una extensión para la devolución de tres años pero por USD 40.000 millones, es decir USD 10 mil millones.

El mensaje del FMI al anunciar el pacto con Grecia también prometía la búsqueda de "proteger a los pobres" y estipulaba que al cabo de los tres años de duración habría un saneamiento total de la economía. ¿Qué pasó? Todo lo contrario: el país europeo aplicó todas las directivas que impuso el organismo multilateral, pero en lugar de una economía saneada con "pobres" protegidos, terminó hundida no sólo en la peor recesión de su historia sino también en el caos económico más profundo experimentado por una nación en el último siglo sin guerras mediante.



Así lo reveló un artículo del portal BAE, según el cual las consecuencias del pacto con el FMI en Grecia fueron catastróficas: más desocupación, menos PBI, menos inversiones, menos salario real y menos jubilaciones y asistencia social.

Más precisamente, lo que ocurrió durante el período de tres años de duración del pacto e inmediantamente después en ese país europeo fue un desplome del PBI del 27%, caídas del 40% del salario real, las jubilaciones y los planes sociales, una desocupación que supera el 22% y araña el 50% entre los jóvenes y una inversión real fija que bajó a la mitad en relación al PBI. Incluso, ese feroz ajuste que recetó el Fondo aún es visible en las calles de Atenas, donde vive la mitad de los griegos.

De hecho, un dato que materializa el duro impacto del ajuste impuesto por el FMI en Grecia y sus resultados en la vida concreta y cotidiana de los ciudadanos helenos asusta: las tasas de suicidio, de las más bajas del planeta antes de la crisis, se dispararon un 13% entre 2008 y 2013.

El testimonio de quienes eran funcionarios durante la aplicación del acuerdo e incluso siguen trabajando para el gobierno de la coalición izquierdista Syriza es demoledor para los argumentos de Macri y Cambiemos. El actual vicecanciller Georgios Katrougalos, ministro de Trabajo durante los primeros dos años de Alexis Tsipras y ejecutor de los últimos tres de los 13 recortes de haberes jubilatorios registrados desde 2010, es lapidario.

"Espero que nunca más Grecia tenga que pedir la intervención del FMI. Uno no puede resistir el chantaje del Fondo si está bajo un acuerdo", aseguró en diálogo con BAE.

A contracara del acuerdo "preventivo" justificado por Dujovne, Katrougalos disparó: "Si hay alguna manera para cualquier país de evitar acudir al Fondo Monetario, ésa es mi sugerencia después de una experiencia muy amarga. Ellos no aceptan que tienen una posición ideológica. Se presentan como tecnócratas. Dicen que solo hacen recomendaciones generales y no demandan cosas concretas, pero la verdad es que imponen un micromanagement".

Otros países que tienen acuerdos stand by son Ucrania, Moldavia, Serbia, Kosovo, Bosnia Herzegovina, Kenia, Armenia, Jamaica, Honduras, Egipto, Giorgia, Suriname, Seychelles, Jordania, Irak, Túnez y Sri Lanka.