El Gobierno de
Mauricio Macri tomó el camino de la chicana a la hora de dar una respuesta al reclamo de la CGT y la oposición por una modificación en la política económica. Tras el puntapié incial del ministro de Energía,
Juan José Aranguren, ahora
la canciller Susana Malcorra mandó a quienes quieren un cambio en el "modelo económico" o hacen reclamos salariales a ganar "elecciones".
"El derecho a tener una opinión distinta y un modelo económico distinto está bien, pero la instancia no es en una cuestión salarial sino en las elecciones", disparó la ministra de Relaciones Exteriores y Culto en declaraciones a la agencia DyN consultada por los dichos de Macri acerca de la existencia de sectores que buscan desestabilizar al gobierno.
Para Malcorra, la "instancia" en la cual pronunciarse no es una medida de fuerza por un reclamo salarial "sino en las elecciones" porque, aclaró,
"el que se confunda desafía las reglas que están establecidas".
"Otra cosa es utilizar una negociación salarial o sindical para poner en discusión la decisión de los argentinos en las elecciones", opinó la funcionaria durante una conferencia de prensa en el Palacio San Martín.
