"Ustedes serán mis testigos de que este gobierno será un defensor de la Constitución, de la democracia y la libertad. Es una promesa no de un partido, no es la palabra de un hombre, es un juramento ante Dios", afirmó Bolsonaro en su primer discurso como presidente electo de Brasil.
Asimismo, convocó a sus votantes y aliados a “cambiar el destino de Brasil” tras explicar que el país estaba “flirteando con el socialismo, el comunismo y el populismo.
El triunfo del candidato del Partido Social Liberal (PSL) se celebró frente a su casa en Barra de Tijuca, un exclusivo barrio de Rio de Janeiro, y en San Paulo.
Por su parte, Fernando Haddad dijo que el Partido de los Trabajadores deberá “reconectarse con la población más pobre, para rehacer un programa que pueda sensibilizar mentes y corazones”. Además, afirmó: “Están en juego a partir de ahora los derechos civiles, los derechos políticos, laborales y los derecho sociales. Tenemos una tarea enorme de defender el pensamiento y las libertades de 45 millones de personas que nos acompañaron".
El candidato de ultraderecha ganó con el 55,2% de los votos contra el 44,7% de Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT). Es la primera derrota del PT luego de cinco elecciones presidenciales, había ganado en los años 2003, 2006, 2010 y 2014.
