30.06.2020 / Espionaje M

El secretario Ejecutivo de AFA se presentó como querellante ante el juzgado de Ramos Padilla por espionaje ilegal

La red de espionaje ilegal y extorsión llevada adelante por los espías de la AFI macrista sigue destapando ollas, se conoció que el entramado de Angelici y Stornelli espió desde abril del 2017 a Pablo Toviggino, secretario ejecutivo de AFA, con el objetivo de conocer los movimientos del presidente Tapia. También se suman como víctimas Magario, Rosenkrantz y Menéndez.





El Secretario Ejecutivo de la AFA, Pablo Toviggino, fue víctima de espionaje desde el 18 de abril del 2017 a tan solo 20 días de la asunción de Claudio Tapia como presidente de la asociación lo que marca cuál era el verdadero fin de esta banda ilegal: espiar al principal mandatario de AFA.

En esta línea, en los próximos días, la Asociación del Fútbol Argentino se presentará como querellante en la causa de espionaje y extorsión que lleva adelante el juez Alejo Ramos Padilla en los tribunales de Dolores. En dicha causa se encuentra detenido el falso abogado Marcelo Sebastián D´Alessio quien reportaba a la exministra de Seguridad Patricia Bullrich y al fiscal Carlos Stornelli quien también se encuentra imputado.

Según consta en el expediente las tareas de averiguaciones fueron llevadas adelante por el prefecto Franco Leandro Pini quien accedió en manera ilegal e indebida a la base de datos de la Dirección Nacional de Migraciones en al menos tres oportunidades “excediendo las autorizaciones que poseía y abusando de sus atribuciones específicas”. La Prefectura es dependiente del Ministerio de Seguridad nacional que por entonces comandaba Patricia Bullrich quien estuvo involucrado en la causa y acusó que los chats encontrados en el celular de D´Alessio no habían sido con ella sino “con su nieto”.

La asociación ilícita que investiga Ramos Padilla en la causa caratulada “Stornelli Carlos y otros s/ asociación ilícita y extorsión querellante: Etchebest, Pedro y otros” tiene como víctimas no sólo a Toviggino sino a una serie de dirigentes políticos como la actual vicegobernadora bonaerense Verónica Magario, al presidente de la Corte Suprema de Justicia Carlos Rosenkrantz, al intendente del partido de Merlo Gustavo Menéndez, entre otros.

Quien actuaba en nombre de la Agencia Federal de Inteligencia que conducían el intermediario de futbolistas FIFA Gustavo Arrribas y la Señora 8 Silvia Majdalani era el abogado radical y exmiembro de la SIDE de la Alianza en tiempos de Darío Richarte -vice de Daniel Angelici en Boca- Pablo Pinamonti. El letrado actuaba de nexo con D´Alessio y la banda que contaba con los espías detenidos Rolando Hugo Barreiro, Oscar Bogoliuk y Aníbal Degastaldi.

Pinamonti fue el que puso en función por orden de Arribas, apuntado por Roberto Digón como testaferro de Mauricio Macri, el Área de Asuntos Internos a cargo de Sebastián Destéfano otro hombre de Angelici. Según declaró en Dolores el propio D´Alessio, Destéfano se encargaba de realizar las tareas de espionaje y extorsión.

La causa que corre en Dolores tuvo orígen por la denuncia del empresario Pedro Etchebest quien fue apretado personalmente por D´Alessio y por el fiscal de la Nación Carlos Stornelli quien se encuentra procesado en la causa luego de pasar varias semanas en rebeldía por no acatar la citación indagatoria que le había marchado el juez Ramos Padilla.

A fines del año 2019 fue procesado por los delitos de asociación ilícita, violación a Ley de Inteligencia, incumplimiento de deberes legales de funcionario público. En el escrito del procesamiento, el juez asegura que Stornelli “aparece claramente vinculado con la actividad ilícita desarrollada por esta asociación dedicada al espionaje y la inteligencia ilegal, en particular a partir de prueba hallada en el domicilio de Marcelo D'Alessio”.

Los vínculos de Stornelli con Angelici y Mauricio Macri se remontan a la época de Boca Juniors cuando se desempeñó como vocal y miembro de la Comisión de Seguridad. Cómo se señaló anteriormente, Pinamonti el encargado de la dirección de operaciones que llevaba adelante las maniobras de extorsión responde directamente a Darío Richarte quien estuvo al frente de la Secretaría de Inteligencia del Estado en la presidencia de Fernando De la Rúa y que le valió causas por la masacre de otros argentinos en las jornadas del 19 y 20 de diciembre del 2001.

El flamante tesorero de la AFA ya fue aceptado por Ramos Padilla como querellante a través de una presentación realizada en su juzgado la última semana pero ahora será la propia Casa Madre quien realizará una presentación formal para destapar la red de espionaje ilegal y extorsión que tenía como finalidad conocer los movimientos personales del presidente Claudio Tapia.