El Gobierno denunció penalmente al titular del sindicato del neumático (Sutna), Alejandro Crespo, por la toma de una oficina del Ministerio de Trabajo y suspendió las negociaciones de la paritaria mientras se mantenga la ocupación. Al mismo tiempo se espera una reunión multisectorial para encontrarle una solución al conflicto que no parece acabar.
Tras la primera noche de pernocte en la que el sindicalista y el equipo de colaboradores paritarios pasaron en el edificio,
el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, suspendió las negociaciones para no convalidar la ocupación y ordenó el desalojo esa sede por completo para trasladar a sus funcionarios al edificio principal de Alem 650.
Además hizo una denuncia penal ante la Justicia, que recayó en el juez
Daniel Rafecas, “a fin de evitar cualquier situación que pueda generar mayor nivel de conflictividad o perjuicio en personas o bienes”. “ Solicito su intervención y pongo en su conocimiento la presente manifestación a fin de que arbitre los medios necesarios para evitar perjuicios mayores”, sostuvo el ministro.
EL CONFLICTO CON EL SINDICATO DEL NEUMÁTICO
El conflicto ya lleva cinco meses entre reclamos salariales, audiencias, huelgas y bloqueos, pero llegó a su punto de mayor tensión el miércoles pasado, tras una audiencia celebrada en esa sede del Ministerio de Trabajo con la participación de representantes del Sutna y de la Cámara de la Industria del Neumático.
Durante la reunión las empresas ratificaron su última oferta: un aumento del 66% y el pago de un bono anual, con límites y sujeto a condiciones como presentismo, para quienes trabajen en fines de semana.
Algo que el gremio consideró“insignificante” frente a que la cifra no compensa la inflación acumulada en el período de la paritaria vigente y pide por el reconocimiento al 200% de las horas trabajadas en sábado y domingo. Fate, Bridgestone y Pirelli abastecen al 90% de los modelos que se fabrican en el país, entre ellos, los de mayor volumen de producción, ventas internas y exportaciones.
Según expresó Sutna a través de un comunicado, las patronales "intentan en forma objetiva imponer de hecho el cierre de la paritaria 2021-2022, desconociendo en forma total los reclamos de los trabajadores y proponer un aumento insignificante de la paritaria 2022-2023, del 38%, cuando las proyecciones oficiales llegan casi al 100% para ese período".
