Luego de que el Gobierno oficializará a través del decreto 599/2024 la desregulación y modernización del transporte aéreo, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) anunció una medida de fuerza para el próximo viernes 12 de julio que podría causar demoras y cancelaciones en el inicio de las vacaciones de invierno.
En ese sentido, el secretario general de la Asociación, Pablo Biró, consideró que
“este Gobierno está rifando absolutamente toda nuestra soberanía”. “Esto es una desregulación total del sistema aerocomercial que no funciona en ningún lugar del mundo. Desregulan las tarifas para poder rebajar pasajes, hacerte quebrar y después que lo logran los suben”, aseguró en declaraciones radiales.
Por otra parte, no solo señaló que
“están desregulando todo y entre los riesgos está la seguridad”, sino que detalló que desde el viernes “habrá asambleas que van a demorar vuelos”.
Al mismo tiempo, habilita a quienes tengan pequeñas aeronaves a ejercer una industria lícita sin la burocracia actual que les exige los mismos requisitos de una gran línea aérea.
“Esto permitirá que ciudades intermedias del interior del país, que hoy no tienen vuelos directos, accedan a una mayor conectividad”, aseguró la Secretaría.
Por su parte, también se reglamenta los acuerdos entre empresas en los que deciden cooperar para conectar sus operaciones, compartir horarios de vuelo, rutas, recursos, conexión de vuelos, entre otros puntos.
Ante el anuncio del Gobierno nacional por la desregulación y modernización del transporte aéreo, Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) denunció que la empresa canceló la reunión en el marco de las negociaciones paritarias que tenían pautadas ayer con el objetivo de tratar la recomposición salarial.
Según detalló el secretario general del gremio Pablo Biró, desde el viernes “habrá asambleas que van a demorar vuelos”. En ese sentido, aclaró que
“no habrá paro que cancele todos los vuelos, pero sí muchos se van a ver demorados salvo que nos hagan una propuesta superadora”.
De esta manera, el sindicato reclama que se reanuden las negociaciones salariales, al tiempo que crece el descontento por la reinstalación del impuesto a las Ganancias a la cuarta categoría, ya que el tributo alcanza a gran parte del sector.
