Doce meses en el llano: ¿Cómo fue el primer año de Macri fuera de la presidencia?

Hace un año atrás, Mauricio Macri, se convertía en el primer presidente de la historia argentina en ir en búsqueda de la reelección y no lograrla. Después de cuarenta y ocho meses como Presidente, un profundo proceso de endeudamiento externo y un Poder Judicial adicto a perseguir opositores, Macri dejaba la presidencia tras ser aplastado por el Frente de Todos en la primera vuelta eletoral.

Pero, ¿qué ha hecho Mauricio desde que quedó desempleado? Lo primero fue lo primero, no había terminado el 2019 que ya se había tomado un vuelo a Qatar para reunirse con su amigo Gianni Infantino, presidente de la Federación Internacional del Fútbol Asociado, para pedirle un puesto de trabajo. Así en enero, Macri fue designado presidente de la Fundación FIFA y al menos se ganaba una oficina en Suiza.

Sin cosquilleos judiciales pese al escándalo de espionaje ilegal que arrinconó a su propio secretario privado, a su amigo del alma y exjefe de la Agencia Federal de Inteligencia Gustavo Arribas, el negociado de los peajes dónde están complicados sus exministros Dietrich e Iguacel y las revelaciones de su propio hermano; Macri pudo pasearse por el mundo en plena pandemia.

Del lado de los teóricos que sostenían que no debía realizarse una cuarentena estricta pese al colapso mundial que provocó el coronavirus, la pandemia fue una excusa perfecta para radicalizar las posiciones de la ahora coalición opositora. Internamente se dedicó a bloquear y dinamitar los puentes que Horacio Rodríguez Larreta tendía con el Ejecutivo nacional desde el Gobierno de la Ciudad. Hacia afuera, de evitar la emergente figura de un "nuevo jefe de la oposición".

La última parte de su primer año fuera del poder lo tuvo en el exterior, sobretodo en Francia, pero de regreso en el país se dedicó a ser un asiduo tuitero que se expresaba contra todo lo que hacía el Gobierno y condicionaba su frente interno. Convertido en panelista del diario La Nación -dónde habría comprado acciones- Mauricio pasa sus días finales del 2020 con un interrogante: jugarse el cuero o no en las legislativas del año próximo.