“La Cámara tiene muy poco tiempo porque la jueza al ser recusada ninguna medida decisiva puede tomar la jueza. La resolución tiene que ser muy rápida”, expresó el abogado de CFK, José Manuel Ubeira tras conocerse la noticia de que la jueza María Eugenia Capuchetti delegó la investigación sobre el atentado contra Cristina al fiscal Carlos Rivoló.
También cuestionó que no se haya dado oído al pedido para que a los integrantes de la banda de Los Copitos se los caratule como “asociación ilícita” mientras que recordó el accionar del fiscal Diego Luciani en relación a la causa Vialidad. “La asociación ilícita es un delito contra la tranquilidad pública. Ningún gobierno es una asociación ilícita. En este caso, si cabe porque han alterado el orden público. Otro de los requisitos es la comisión de los delitos indeterminados y en los chats surge eso”, sostuvo en declaraciones a C5N.
Respecto del porqué no se unifica dicha investigación con la relativa a la que atañe a las amenazas emitidas por el grupo Revolución Federal, que tiene a su cargo el juez Marcelo Martínez de Giorgi, Ubeira señaló: “Ellos dividieron artificialmente la causa porque la que investiga Martínez de Giorgi tiene los mismos componentes”.
A pesar de haber rechazado su recusación de los abogados de CFK y de elaborar un informe con el que pretendió contrarrestar las críticas de la querella, esta tarde Capuchetti buscó una salida alternativa para intentar descomprimir la tensión en torno a la investigación.
Para Ubeira,
“las medidas que eran decisivas para esclarecer el asunto fueron boicoteadas desde adentro”. “Para nosotros es grave que el testigo termine con falso testimonio”, indicó.
Agregó:
“Nosotros hacemos responsables a la Justicia Federal de la seguridad de Cristina y su familia. Esto es grave de cara a las elecciones que se vienen, ya sea o no candidata. Están regalados como para que atente cualquiera”.
Sobre el accionar de Capuchetti, señaló: “Si tira del piolín se le viene la estantería encima. Por eso, tuvo que obturar a las dos asesoras de (Gerardo) Milman. Si la Justicia Federal se llena la boca diciendo que esto es un hecho gravísimo y luego procede como procede es una hipocresía”.
Y puntualizó en relación a las pruebas pérdidas en la primera etapa de la investigación: “Lo que se perdió, se perdió. El funcionamiento de detención de determinadas pruebas dentro de los procesos penales tiene un ritmo. La prueba que actuó en un momento determinado no se vuelve a repetir. Por eso, denunciamos todo lo que teníamos que denunciar”.
