
La Cámara de Apelaciones en lo Comercial le concedió este viernes a
Marcelo Tinelli una medida cautelar que les prohíbe a
Cristóbal López y su socio,
Fabián de Sousa, realizar cualquier movimiento accionario del
Grupo Indalo, dado que se puede afectar la
deuda millonaria que la empresa mantiene con el conductor televisivo por realizar el programa ShowMatch y por la venta de Ideas del Sur.
Los camaristas Alejandra Tevez y Rafael Barreiro ordenaron ayer a López y de Sousa "que se abstengan de causar, realizar, perfeccionar o ejecutar cualquier acto de disposición que altere o sea susceptible de alterar la actual composición de su patrimonio". Según señalaron desde el entorno del conductor,
Tinelli "sólo cobró entre dos y tres sueldos este año". De est emodo, la empresa tiene una
deuda por unos $ 130 millones, según reconstruyó el diario La Nación.
En tanto, la empresa de López aún adeuda el pago de la
venta del 19% de Ideas del Sur, el cual tuvo lugar en abril del año pasado. En este caso,
la deuda por esta operación asciende a los US$13 millones.
El Grupo Indalo mantiene una deuda millonaria con el Estado y López y De Sousa fueron procesados por el juez
Julián Ercolini por tratar de eludir la
inhibición de bienes que el magistrado había ordenado para evitar la
insolvencia por la deuda impositiva. Por esta misma causa, se dictó la prisión preventiva de los empresarios. En este marco, el Juez analiza la posibilidad de levantar las inhibiciones para permitir la
venta del Grupo a OP Investment. El dueño del holding,
Ignacio Rosner, hizo una proupesta para pagar las deudas y salvar a la empresa.
En tanto, la Cámara Comercial había dado el visto bueno para el
llamado a concurso de acreedores, lo cual permitiría la regularización de las cuentas, pero esta resolución detuvo esa opearción dado que puede perjudicar los derechos de Tinelli.
Los últimos meses fueron conflictivos para los trabajadores del Grupo Indalo. Con el cambio de la línea editorial, muchas figuras de los medios manejados por esta empresa fueron despedidas y los empleados comenzaron a cobrar sus
sueldos en cuotas, por lo que se declararon en estado de alerta y asamblea.