A pesar de que el propio presidente
Mauricio Macri y sus funcionarios de primera y segunda línea buscan instalar que el
G20 no sólo significó para el país un
"éxito" a nivel simbólico sino también desde la economía concreta, a penas 24 horas después de finalizada la cumbre se conoció una novedad desde el viejo continente que es un cachetazo a esa versión:
en Europa propusieron volver a ponerle aranceles al biodiésel argentino.
Según informó la agencia Reuters,
la Comisión Europea propuso restablecer aranceles antisubsidios contra las importaciones
argentinas de biodiésel. Se trata de una iniciativa impulsada tras un planteo formulado por los productores del biocombustible de ese bloque, que reclaman por el aumento de las ventas del producto argentino en ese mercado.
La Argentina había conseguido volver al mercado de biodiésel de Europa el año pasado, tras aranceles antidumping que se prolongaron cuatro años y que en su momento sobrevinieron después de la nacionalización, en 2013, de YPF, que la española Repsol tenía en sus manos.
Luego,
en 2014 cuando gobernaba Cristina Fernández de Kirchner, la Argentina llevó el caso a la Organización Mundial de Comercio (OMC), reclamo que finalmente tuvo su fallo favorable el año pasado, ya con Macri en Casa Rosada, con lo cual ese bloque tuvo que reabrir su mercado.
Con Estados Unidos cerrado por sanciones que también impuso ese país, Europa se había convertido nuevamente en el principal destino de las ventas de biodiésel. De hecho, antes de 2013 representaba un negocio por más de US$1500 millones.
Ya en enero pasado, una cámara europea volvió a protestar contra el biodiésel argentino. Según la agencia de noticias británica, la Comisión Europea decidió no restablecer aranceles provisionales de importación en septiembre, pero consideraba que las importaciones estaban subsidiadas. Por eso
ahora, ante este nuevo reclamo y a sólo horas del G20, los Estados miembros deberán aprobar o no esa propuesta para losaranceles.
