04.08.2021 / Contundente respuesta

“Me gustaría que venga al Museo Malvinas”, la invitación del director del espacio histórico a Beatriz Sarlo

La escritora había dicho que las islas eran “territorio británico”. Le exigen “dignidad y respeto por los muertos” con el repudio de ex combatientes y funcionarios a los dichos pronunciados por la intelectual. “Parece una necesidad de lastimar gente faltándole el respeto a nuestros muertos", dijo Edgardo Esteban en diálogo con Política Argentina.

por Morena Marcos




Funcionarios y excombatientes condenaron las declaraciones de la ensayista Beatriz Sarlo respecto de que las islas Malvinas son “un territorio británico”. “Cómo duele que una referente intelectual diga semejante barbaridad. No tiene respeto ni a los muertos enterrados en nuestras islas. Por favor, un poquito de dignidad. Por siempre las Malvinas son Argentinas”, había escrito en redes sociales Edgardo Esteban, director del Museo Malvinas.

El funcionario, que dialogó con Política Argentina sostuvo que si bien “me sorprende porque es una persona que a pesar de tener diferencias siempre he respetado intelectualmente”. “En este tema desde la ignorancia o el desconocimiento no se puede hablar. Más allá de haber estado en Malvinas. Yo estuve 5 veces, y más que verse un paisaje de Escocia, el paisaje de nuestras Islas es mucho más cercano a la Patagonia, habla de un desconocimiento sobre nuestro territorio”, expresó.

“Desde esa Perspectiva duele, me gustaría invitarla a que venga al museo Malvinas y que conozca lo 500 años de historia que tiene nuestra causa y que antes de la usurpación británica de 1983 había una comunidad que estaba representando a las provincias del Río de la Plata, tenían sus familias, su vida, sus actividades. Muchos diarios narran esa historia de la creación del Puerto Soledad, incluso contamos con la carta de San Martín que le pedía al Gobernador de San Juan que le mandara a los presos que estaban en Malvinas para que se sumen al ejército Libertador”, repasó Edgardo Esteban al exponer el desconocimiento de la escritora sobre la historia de soberanía nacional que cargan las Islas.

”Hay necesidad de lastimar a mucha gente”



En este sentido, lamentó que “hablen con tanta liviandad sin pensar en nuestro caídos, sin pensar en lo que significó la Guerra, la dictadura, el Gobierno de Galtieri, de nuestras muertos que están enterrados en esas islas en Darwin, también genera dolor. Hay una necesidad de lastimar a mucha gente que perdió mucho y que siente mucho por esa línea transversal que atraviesa a toda la sociedad argentina cuando se dice algo así”.

Explicó entonces que se trata de “una causa de Estado. No son dos islitas, son 2 millones 400 mil kilómetros cuadrados que pretende el Gobierno Británico, con lo que van a controlar nuestros mares, nuestros recursos naturales, controlar los pasajes Atlántico y Pacífico, es el único lugar por el que pueden pasar submarinos nucleares, y porque pueden controlar el continente blanco, la mayor reserva de agua potable del planeta. No es una cuestión de sentimentalismo. Es respeto por nuestro muertos, por nuestro territorio y mirando para el futuro de nuestros recursos”.

Por su parte el Centro de Excombatientes de La Plata (Cecim) también se sumó a las críticas por vía de su presidente, Hugo Robert, que calificó las expresiones de la escritora como una “barbaridad”. “Sarlo fue una de las 19 pseudointelectuales que firmaron una solicitada por la autodeterminación de las islas. Hay mucho dinero de la embajada de Reino Unido para financiar todo esto”, dijo, en declaraciones citadas por la agencia Télam. Y ligó los dichos de Sarlo con palabras anteriores de la candidata opositora Sabrina Ajmechet y la presidenta del Pro, Patricia Bullrich.


OPOSICIÓN DESDE EL NEGACIONISMO Y LA BANALIZACIÓN

Sarlo hizo las declaraciones que ahora le cuestionan en una entrevista en LN+. “Las Malvinas son un territorio británico. Cuando la gente dice ‘son argentinas’ no se sientan ni un minuto a pensar, si son argentinas, si no son argentinas, ni qué son las Malvinas. Yo fui a las Malvinas, para una serie de notas. Es un territorio que se asemeja al sur de Escocia”, dijo. Aludió también a la guerra de 1982: “Leopoldo Galtieri mandó militares a Malvinas y eso fue un acto nacional psicótico”. Dijo que el desembarco de las tropas argentinas en el archipiélago “fue una invasión, revindicando tierras que aparentemente fueron de la Argentina en la tercera década del siglo XIX, es decir cuando Argentina no estaba unificada como país y no tenía Constitución”. Con ironía, dijo que ella es “vendepatria” y añadió: “Me importa muy poco la polémica que se genere con un promalvinero. Lo mandaría a vivir seis meses a las Malvinas y trabajar ahí”.

Pero estas repudiables expresiones no fueron la única manifestación de un conservadurismo que niega la soberanía nacional sobre las Islas Malvinas y banaliza los estragos de la Guerra y las vidas perdidas en ese terrritorio. Fue la Presidenta del partido PRO Patricia Bullrich quien en declaraciones que hizo en abril pasado, durante el debate por las fallidas negociaciones con el laboratorio Pfizer por las vacunas contra el coronavirus sugirió, con sorna, que las Malvinas podían entregarse a esa empresa con el propósito de acelerar la llegada de dosis. ”Pfizer no pidió cambios en la ley, lo único que pidió fue un seguro de caución, como se lo pidió a todos los países del mundo, que es algo razonable. No pidió los hilos continentales, ni las Islas Malvinas, bueno, las Islas Malvinas se las podríamos haber dado”, dijo la exministra de Seguridad.

En tanto, la precandidata a diputada nacional y protegida de Bullrich, Sabrina Ajmechet, también se mostró en esta línea cuando difundieron mensajes que había escrito años atrás en las redes sociales. “Las Malvinas no existen, las Falkland islands son de los kelpers” o “la creencia en que las Malvinas son argentinas es irracional, es sentimental” fueron algunos de esos textos, por lo que después dio explicaciones y dijo que eran irónicos.


TEORÍA DEL PÉNDULO

"Hay una teoría del péndulo: cuando hay gobiernos como el actual donde el Presidente cuando asume dice que Malvinas es una cuestión de Estado, que tiene que ser más allá de un Gobierno de turno. Y cuando aparecen los gobiernos neoliberales se decide querer permutar como dijo (Patricia) Bullrich a las Islas Malvinas para ganar facilidades en las vacunas, y desde esas perspectiva duele, porque en eso parece más fácil disfrutar de comodidades con el Gobierno Británico en vez de discutir nuestra soberanía”, explicó el Director del Museo Malvinas Argentinas.

Y concluyó: “Se trata de exigir al Gobierno que se siente a hablar de que no hay otra instancia que no sea superadora que discutir la soberanía. Parece que cuando uno escucha a los referentes neoliberales y a los candidatos en la actualidad  lo único que les importa es estar cerca del Reino Unido, hasta que sus hijos estudien ahí, y no reconocer nuestro mapa bicontimental, y es una falta de respeto a esta lucha y este amor que tenemos todos los argentinos por nuestras Islas Malvinas”.