Martín Lousteau defendió enfáticamente su proyecto de ley para eliminar las indemnizaciones por despido argumentando que "con convenios colectivos antiguos en trabajos actuales tampoco se puede generar buen nivel de trabajo, esto hay que discutir. La primera discusión es si Argentina genera suficientes puestos de trabajo y la respuesta es no".
Entrevistad por Radio con Vos, el senador radical argumentó que
"el proyecto que presenté se llama Fondo de Cese Laboral; si lo hubiera presentado el kirchnerismo lo hubiera llamado Ley de Solidaridad de la Garantía de la Indemnización y el Complemento Jubilatorio. El eje del proyecto es para empresas medianas y pequeñas en el contexto actual; las empresas grandes tienen otra espalda para lidiar con juicios laborales pero en las pymes quedan partidas al medio".
"El proyecto establece un aporte de las empresas que va generando, igual que el sistema jubilatorio, un fondo para el cese laboral.
La indemnización sería la misma que con la ley actual, con la diferencia de que es un aporte colectivo. Mensualmente el empleador pagará una parte del sueldo en un fondo como si fuera jubilatorio: en caso de quiebra estaría el dinero asegurado, en caso de fallecimiento del empleador hoy te pagan el 50% y con esta ley sería el 100%. Podemos discutir en el Congreso Nacional si es o no el mejor proyecto, pero no podemos debatir con falsas argumentaciones", agregó.
Respecto de la comparación con el sistema de construcción dijo que "la creación de empleo no depende sólo de ese sistema; en el sector de la construcción a veces hay creación de puestos de trabajo por motivos malos, como cuando por el cepo cambiario la gente no puede comprar dólares y los pone en ladrillo".
"Esto no resuelve el problema del empleo de Argentina, es una discusión para las pymes que generan los mayores puestos de trabajo que tienen un problema grave de inseguridad de los juicios laborales; para poder cobrar el fondo, el trabajador tiene que aceptar la liquidación final que corresponde. También se lleva el dinero si renuncia", insistió.
Lousteau dijo que "entiende los miedos que se tienen de que el Estado se quede con esos fondos o que lo agarre el kirchnerismo para gastárselo en políticas expansivas previas a la campaña electoral, pero con ese criterio no se puede construir nada", y completó: "No lo planteo como una solución pero solamente en Ciudad de Buenos Aires, los honorarios de los juicios laborales son mil millones de pesos por año".
"Sería una contribución más y correría como incidencia de los impuestos. Esto trata de eliminar una contingencia imprevista que puede dar vuelta a las empresas chicas. La discusión pública tiene que ver más por el entorno electoral que por otra cosa", cerró.
