
Los gobernadores de Jujuy, Santa Fe, Neuquén, Entre Ríos y Salta expusieron este martes en el plenario de comisiones de Presupuesto y Finanzas de la Cámara de Diputados por el acuerdo de reestructuración de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Es cierto que esta deuda la tomamos nosotros, y me hago cargo, más allá de las participaciones, y tuvo que ver con una decisión de nuestro gobierno. Algunos halcones me pegan por esto pero esta es la realidad", enfatizó Gerardo Morales, mandatario jujeño y presidente de la UCR.
En ese marco, planteó: "De acá tenemos que salir con la ley, con la aprobación del acuerdo para impedir el default porque cuando se complica la economía los que se joden son los más pobres".
"No puedo abstraerme de mi condición de gobernador y las consecuencias que un default podría traer para nuestras provincias", reiteró.
En tanto, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, fue crítico al señalar que el país tiene que resolver un crédito que no pidió, no se usó pero que "hay que pagar".
"Tenemos que resolver un crédito que no pedimos, que no usamos y que hay que pagar. Amerita el mayor nivel de análisis de responsabilidad para el cumplimiento de los compromisos", criticó el mandatario.
El mandatario santafesino reiteró que lo que se pretende es "que el financiamiento de organismos internacionales se pueda mantener en pie porque es allí donde tenemos posibilidades de inversión".
El neuquino Omar Gutiérrez, a su turno, expresó que
"la falta de acuerdo implica un ´sí al default" y advirtió que el rechazo al proyecto de ley "implica más pobreza, más recesión, más inflación, más postergación”.
“Las provincias y el Gobierno nacional tiene en stand by programas de financiamiento de inversión privada y pública hasta que se resuelva esta situación”, sintetizó al evaluar la situación actual.
En ese sentido, recordó la posición del Movimiento Popular Neuquino: “Nuestra postura es ‘no al default’. El Movimiento Popular Neuquino no forma parte de la grieta, pero sí les pido a los actores de los dos principales proyectos que tengan seriedad para construir consensos y que no haya ganadores ni perdedores”.
Mientras que Gustavo Sáenz, de Salta, llamó a encontrar
"un punto de encuentro" para respaldar el acuerdo con FMI y aseguró que cuando "hay posiciones antagónicas se resuelven en una mesa de diálogo".
El gobernador sostuvo que es fundamental "dar la tranquilidad" a los que prestan plata al país ya que es necesario demostrar que la Nación "es previsible y brinda seguridad jurídica".
"No les pedimos nada que no hayamos hecho nosotros, hacerse cargo de una deuda, eso se llama continuidad, eso se llama Estado y hay cumplir y honrar con las deudas", remarcó.
A su vez, destacó la actitud de su par Gerardo Morales, que "antepone intereses partidarios y mezquinos por intereses superiores que son los de la Nación y la República". Y abogó por "dejar de lado las peleas que no tienen sentido porque no le solucionan el problema a la gente".
Por último, el mandatario de Entre Ríos, Gustavo Bordet, pidió encontrar "una solución para dar previsibilidad" y "generar condiciones para honrar compromisos que otras gestiones no asumieron".
Asimismo, sostuvo que
"el entendimiento que se va a tratar es el mejor entendimiento al cual se pudo arribar, a diferencia de lo que se había exigido al Fondo en otras ocasiones, claramente está planteando diferencias notorias".
"Hay ejes que eran siempre puestos en todos los préstamos del FMI, donde se obligaba a los gobiernos a generar reformas laborales y este no lo contempla, tampoco hay una reforma previsional. No queremos variables de ajuste", enfatizó Bordet.
En paraleo, indicó que "de no aprobarse sería sacar a la Argentina del mundo y tendría consecuencias sumamente negativas en nuestras provincias porque impactaría en nuestro sistema de producción". " No lo buscamos pero lo tenemos que resolver. Se tomó de una manera irresponsable pero ahora lo tenemos que resolver siendo responsables", concluyó.