
Finalmente y tras extensas idas y vueltas,
la Cámara de Diputados inicia este martes el debate en comisión de los primeros proyectos con los que el Frente de Todos busca impulsar un mecanismo de consensos con la oposición: se trata de aquellos que buscan modificar la actualmente cuestionada y otrora apoyada desde todos los sectores Ley de Alquileres, con la exposición de asociaciones de alquileres, inquilinos, propietarios y de inmobiliarias de todo el país.
El encuentro, convocado para las 13 y que se extenderá hasta las 17, se realizará en forma virtual y luego pasará a cuarto intermedio hasta la semana próxima, tras los feriados de Semana Santa.
En esas cuatro horas está previsto que expongan
43 invitados, con preponderancia de representantes de cámaras inmobiliarias y de asociaciones de inquilinos del interior del país, desde Jujuy hasta Tierra del Fuego.
Por otro lado, y en menor cantidad, participarán tres asociaciones de defensa del consumidor, una cámara de propietarias y un par de centros de estudios.
De acuerdo con el cronograma establecido, la comisión retomará el debate la semana próxima con dos reuniones presenciales, el martes 19 y miércoles 20,
bajo la expectativa de que entre el martes 26 y miércoles 27 se pueda iniciar y concluir la firma del dictamen.
Si esto sucede,
una sesión para dar media sanción en Diputados podría estar el jueves 28, en caso de querer hacerla lo más rápido posible, y sino a partir de los primeros días del mes de mayo. El acuerdo entre bloques, que encabezó la diputada Cecilia Moreau hace 10 días, indica que desde hoy corre un plazo de un mes para que se llegue al recinto con un nuevo proyecto de ley para que sea puesto a consideración del pleno.
Los principales espacios políticos, con el Frente de Todos y Juntos por el Cambio a la cabeza, consensuaron abordar el tema luego de que la mencionada coalición opositora decidiera levantar el pedido de sesión especial para tratar el tema -el mismo martes 5-, en un plenario en el que, a priori, el oficialismo no daría quórum y JxC no alcanzaría ese objetivo ni la mayoría especial para debatir el proyecto sin el dictamen correspondiente.
La coincidencia, entonces, es avanzar sólo con la derogación de los dos artículos más cuestionados a menos de dos años de su sanción y de uno de su implementación. Pese a las llamativas críticas del ex presidente Mauricio Macri y los sectores más radicalizados del PRO, las dos cuestiones más objetadas de la norma fueron impulsadas por su espacio durante su gobierno.
La primera tiene que ver con los plazos de los contratos, que se extendieron a un mínimo de tres años, en lugar de los dos que regían anteriormente. La otra fue la implementación de la metodología de actualización de las rentas, basada en un promedio entre el Índice de Precios al Consumidor y el salario promedio, con un intervalo de ajuste anual.