El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) confirmó que otorgará un crédito de USD 80 millones a la Argentina destinado a fortalecer el aparato Pyme, según hizo saber hoy la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo.
La novedad, además de los dólares frescos para las reservas argentinas, tiene que ver con que se trata del organismo liderado por
Mauricio Claver-Carone, un "halcón" cercano a Donald Trump, el amigo de Mauricio Macri, quien además de haber soltado en 2020 que el préstamo del FMI pretendió ayudar a Cambiemos electoralmente había sido crítico con la situación económica del país días antes de la asunción de
Sergio Massa en el Ministerio de Economía.
Sin embargo, tras haberse comunicado con el nuevo titular de Hacienda felicitó su llegada e inició un camino para destrabar el flujo de dólares para proyectos productivos, créditos que además ya habían sido aprobados por el organismo pero luego trabados solo por interés político.
El programa fomentará el desarrollo productivo innovador y ambientalmente sostenible de las mipymes y promoverá su transformación digital, fortaleciendo la asistencia gubernamental para estas empresas en todas las regiones del país. Adicionalmente, el proyecto fortalecerá la red federal de servicios de apoyo y promoverá la descentralización de los programas e instrumentos de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo, informó la Secretaría de Industria.
El crédito del BID de USD 80 millones tiene un plazo de amortización de 25 años, un período de gracia de cinco años y medio y una tasa de interés basada en SOFR, publicada por la Reserva Federal de Nueva York desde el año 2018, y que refleja el costo a un día de los préstamos garantizados con Repos de títulos del Tesoro norteamericano.
Días antes del anuncio de Massa superministro, Claver-Carone había asegurado en una columna de opinión que la entidad no puede girar a la Argentina unos USD 500 millones debido a problemas de falta de transparencia y un “tumultuoso historial financiero”.
“El éxito de la Argentina es el éxito del BID, pero el tumultuoso historial financiero de Argentina afecta singularmente a los costos del banco. El BID debe proteger su capacidad de ayudar de forma fiable a todos sus 26 prestatarios, incluidos los países pequeños con pocos recursos”, expresó en aquella oportunidad el hombre que reconoció que el endeudamiento con el FMI que Macri metió en la Argentina tenía como propósito darle impulso electoral para buscar la reelección, cosa que además no logró.
Tras el arribo de Massa al gabinete, el tigrense se reunió con Claver-Carone y destacó avances en la negociación para destrabar créditos para la Argentina. Al mismo tiempo, se comprometieron a reunirse en persona hacia fines de agosto cuando Massa visite a Washington, junto a la titular del Banco Nación,
Silvina Batakis. Allí también dialogará con máximas autoridades de FMI, Banco Mundial y el Tesoro de Estados Unidos.
