21.09.2022 / Intento de magnicidio contra CFK

Los chats de Brenda Uliarte: "La próxima voy y gatillo yo, Nando falló"

Más chats de whatsapp, hallados en el teléfono celular de uno de los imputados, complican al detenido Gabriel Carrizo. "Yo sí sé disparar bien, no me tiembla la mano", le aseguró Uliarte al líder de la banda “los copitos”.





La Justicia investiga una serie de mensajes encontrados en el teléfono celular de uno de los imputados que determinan que Gabriel Nicolás Carrizo tenía un rol central en el atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y que la detenida Brenda Uliarte seguía queriendo ejecutar un magnicidio después del intento fallido.

"La próxima voy y gatillo yo, Nando falló. Yo sí sé disparar bien, no me tiembla la mano", decía Uliarte en un mensaje de Whatsapp que le mandó a Carrizo minutos después de que su pareja Fernando "Nando" Sabag Montiel fracasará su intento de asesinar a la Vicepresidenta, según pudo reconstruir la agencia de noticias Télam.

Ese 2 de septiembre, pocas horas después del atentado, ocurrió un diálogo entre Carrizo y Uliarte que para los investigadores puso de relieve que seguían con el deseo de llevar a cabo el magnicidio.

-Carrizo: querés hacerlo?

-Uliarte: te juro que si. Y no me va a fallar el tiro. Pero hay que pensarlo bien. Pasa que Nando no tiene mucha práctica. Le tembló el pulso.

Tras lo que continuaron hablando sobre formas de esconderse de la justicia, aunque finalmente la jueza María Eugenia Capuchetti ordenaría sus respectivas detenciones.

-Carrizo: Te vincularon con al caso. Te diría que vengas acá.

-Uliarte: ¿Posta, que saben mis datos? Estoy en un lugar seguro, tranqui ustedes no tienen nada que ver. Lo que decimos que quede acá.

-Carrizo: Si saliste por todos los medios. Sos la novia.

-Uliarte: Si pero si me escondo no va a pasar. No me van a encontrar. Yo sé lo que te digo.

De acuerdo con el informe judicial los datos extraídos del celular de Carrizo eran abundantes las conversaciones en las que se refería a la posibilidad de asesinar a la vicepresidenta.

La idea del magnicidio estuvo presente en los diálogos con Uliarte al menos desde el 23 de agosto, el día después de que el fiscal federal Diego Luciani pidiera 12 años de prisión para la expresidenta en el marco de la causa conocida como Vialidad.

"Ya se les acabó la joda", le escribió Carrizo a Uliarte en una de las conversaciones de ese día y ella  le respondió: "Si que la saquen a la mierda. No puedo creer que hay gente que todavía la defiende".


Uliarte: "Hace falta alguien que vaya con un fierro y le pegue un corchazo a Cristina",

-Carrizo: Si no?

-Uliarte: Si re hace falta.

Aquel día un grupo de manifestantes antikirchneristas se acercaron a la casa de la expresidenta, en el cruce de calles Juncal y Uruguay, con el objetivo de agredirla. Y en zonas cercanas a la casa de la vicepresidenta fue detenido Leonardo Sosa, de Revolución Federal, por un hecho de resistencia a la autoridad, cuando rompió un vallado de madera colocado en una calle para advertir a los autos de la presencia de un pozo.

Junto con él fue detenida otra persona que tenía en su mochila material inflamable: la causa la investiga el juez federal Ariel Lijo.

El  episodio fue reseñado en el fallo con el que el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi le remitió a la jueza Capuchetti, para que se investiguen de modo conjunto las denuncias contra Revolución Federal  con el ataque a Cristina Kirchner.

Dentro de ese fallo el juez Martínez de Giorgi advirtió que por el devenir de los acontecimientos no se puede "afirmar que el plan delictivo haya finalizado ni descartar que se vuelva a intentar respecto de la Vicepresidente de la Nación o de otros funcionarios".