19.04.2024 / El rumbo de la economía

"No la veo": Guzmán cuestionó el affair de Milei con el FMI e hizo una autocrítica por la no acumulación de dólares

El ex ministro de Economía advirtió que "más deuda con el FMI" como busca Milei es "echar nafta al fuego" y coincidió en que hay que bajar el déficit pero señaló que el ajuste lo están pagando "jubilados, vulnerables y clase media". Defensa a su gestión pero autocrítica en un punto clave.




El ex ministro de Economía, Martín Guzmán, apuntó contra la idea del presidente Javier Milei de pedir más dólares prestados al FMI para salir del cepo, dolarizar o financiar más devaluación, cosa que el organismo multilateral, por ahora, resiste. Criticó además la naturaleza de la baja del déficit fiscal, con un superávit que, a su juicio, no es sostenible. Y además defendió su gestión al frente del Palacio de Hacienda durante la primera etapa del gobierno de Alberto Fernández, pero reconoció un punto débil en la imposibilidad de acumular reservas pese a haber logrado una balanza comercial favorable.

Las ideas surgieron de una entrevista que el ex funcionario concedió al economista y autor del libro "Falacias Libertarias" Guido Agostinelli en Washington, en el marco de una reunión del FMI. 

"¿Para qué va a pedirle dinero al FMI si el Gobierno está diciendo que va a hacer un ajuste fiscal y que va a tener equilibrio o superávit fiscal? ¿Qué se quiere hacer con eso?", inició Guzmán su cuestionamiento al gobierno de Milei, consultado acerca de la intención de tomar más deuda con el organismo materializada en estos días en el viaje del ministro de Economía, Luis Caputo, a EEUU por el mismo encuentro del Fondo. 

En ese sentido, el ex funcionario nacional sostuvo que "cualquier uso del dinero que el Fondo preste te genera sospechas" y profundizó: "Dolarizar o financiar una apreciación del tipo de cambio real. O hacer algo con los bonistas de la Argentina. No hay un motivo, no habría que ir al Fondo y no había que haber ido en 2018. Y bueno, ¿ahora vamos a ir a pedirle más?".

Según el economista, "los problemas de Argentina no se resuelven con más deuda con el FMI" y, en cambio, "se resuelven ordenando la economía" y, para eso, según reconoció, "es importante ir bajando el déficit fiscal".

Sin embargo, diferenció ese objetivo de cómo lo está haciendo el gobierno actual: "Nosotros empujamos fuertemente esto. Obviamente que en el año de la pandemia tuvo que crecer el déficit porque se caía la recaudación y había necesidad de gasto. Luego, cuando la pandemia fue cediendo era importante ir bajando el déficit. Tampoco se puede hacer, daña, de la forma en la que se lo está haciendo ahora".



"Lo que no es una necesidad y en cambio es un problema es más deuda con el FMI. Es echar nafta al fuego", concluyó respecto de la idea de Milei y Caputo de pedirle más dólares al Fondo para eliminar el cepo cambiario. 

Consultado por Agostinelli acerca de la naturaleza y la sostenibilidad del superávit y la acumulación de reservas de la que se ufana el gobierno de Milei, dijo: "Primero, hace falta bajar el déficit fiscal, sí. El tema es cómo lo hacés. Y hay una parte muy grande del ajuste que recayó en los jubilados".

"A los jubilados los mató el gobierno de Milei", sentenció Guzmán, y explicó: "Lo que hizo fue con la devaluación hacer crecer la inflación y hace caer el valor real de las jubilaciones. Cuando ya cayó demasiado, ahí hace un anuncio de indexar las jubilaciones para que se mantengan en un nivel bajísimo, donde el ajuste ya se hizo".

"¿Es sustentable o no el superávit de Milei? Eso va a depender de la situación política. Pero fue brutal y cruel que se haya implementado semejante nivel de auste en las jubilaciones. Si la situación política termina siendo favorable a Milei, le va a haber terminado cobrando el ajuste a los jubilados y no a la casta. La clase media lo sufrió, la población más vulnerable lo sufrió y los jubilados principalmente", advirtió.

Asimismo, agregó que la gestión libertaria "no está resolviendo los problemas" y, en cambio, "los está agravando", porque "está redistribuyendo la escasez y, peor aún, está dándole más por ejemplo a las prepagas de las que ahora se queja, y lo mismo hacia adelante".


DEFENSA DE SU GESTIÓN Y AUTOCRÍTICA: DEL FMI A LA NO ACUMULACIÓN DE RESERVAS 

Consultado acerca de su gestión de la deuda con el FMI que se heredó de la administración de Mauricio Macri, Guzmán aseguró que se consideraron todas las posibilidades, incluso no pagar: "Barajamos todas las posibilidades, todas estuvieron sobre la mesa".

"Y se construyó un acuerdo que tenía como principales pilares reducir el déficit de forma progresiva. Había un compromiso de reducir los subsidios de energía pro-ricos, que era disparatado, hicimos lo que pudimos para atacar ese problema. No lo pudimos resolver nosotros. Después la siguiente administración y el siguiente ministro atacó el problema de la segmentación con el diseño que habíamos hecho. Eso era parte de un esquema de políticas económicas virtuoso con las restricciones que teníamos en ese momento", dijo, en el marco de los cuestionamientos que algunos sectores del peronismo hacen respecto de los condicionamientos económicos que Argentina aceptó con ese refinancimiento. 

En ese sentido, Guzmán defendió el acuerdo que se suscribió durante su paso por Economía: "Desde el punto de vista de las políticas, estoy convencido de que ese era el camino para la Argentina y que debe seguir hacia adelante. Hoy mismo estoy convencido que esos son los principios que funcionan para sanear nuestra economía y nuestra sociedad. La parte que no pudimos lograr, que no pudimos lograr y peleamos muy fuerte, que hubo oposición de los principales accionistas del Fondo, es los sobrecargos. Que acá todavía estoy peleando por eso".

En otro segmento de la entrevista, fue consultado acerca de por qué pese a haber logrado una balanza comercial positiva, es decir más ingreso de dólares por exportaciones que salida de divisas por importaciones, no logró acumular reservas durante su gestión. Para explicarlo, precisó que en 2019 había tres grandes problemas de deuda: la deuda del sector público nacional (Wall Street, FMI y Club de París), la deuda de las provincias y la deuda en dólares de las empresas (que había crecido durante el macrismo). 

Mientras que la deuda nacional se refinanció o se reestructuró y las de las provincias también - aunque cuestionada en cuanto a su forma por el ex ministro -, lo que según Guzmán "falló para acumular reservas" fue "el tratamiento de las deudas corporativas en dólares".

"Si me preguntás si la política o la forma en que resolvimos esas deudas estuvo bien o estuvo mal, la respuesta estuvo mal", blaqueó, y agregó: "De hecho esto se discutió en el Gobierno. Había dos propuestas: una era un desdoblamiento de los mercados de cambios haciendo que todo lo que fuera servicios fuera a otro mercado, y eso agarra todas las deudas y que no puedan ir a tomar dólares del Banco Central, y la otra fue la que se implementó".



"Si se hubiera implementado la primera, el desdoblamiento cambiario, cualquier empresa que tenía vencimientos en dólares hubiera tenido que ir a buscar una refinanciación o comprar los dólares en el mercado libre. Eso hubiera generado más incentivo a refinanciar las deudas y las empresas estaban solventes. Eso no estuvo bien y fue un problema, y explica que no se hayan acumulado reservas durante ese período", amplió.

En ese sentido, advirtió que "hoy esa discusión está vigente" y que, una vez que salió de la gestión, el tema pasó a ser "la deuda comercial".

"El gobierno actual encontró una ventana política que es extremadamente gravosa para la Argentina que es el Bopreal, que es este bono en dólares que se suscribe con pesos que en la emisión primaria sólo son elegibles los que tienen deuda primaria en importaciones", dijo. 

Sobre ese punto, retomó la crítica hacia el gobierno de Milei y advirtió que el Bopreal es "el principio de la dolarización, porque de hecho es dolarizar el pasivo remunerado del BCRA, el que rinde un interés".

"Todos los instrumentos que están denominados en pesos, aún atados al dólar, en el BCRA terminan bajando porque quienes suscriben a ese bono tienen que hacerse de peso, entonces desarman posiciones en los propios bancos que tenían como contraparitda las Leliqs. El stock de Leliqs y pases bajan, pero sube otro pasivo para el BCRA, que es el Bopreal, una deuda en dólares. Cuando este Bopreal empiece a vencer, te tienen que dar dólares billete. Te dicen ´bueno, no están los dólares y hay que refinanciar`, ¿qué tasa vas a pedir para refinanciar ese Bopreal? Ahí empieza un problema serio, muy complicado para la Argentina", aseguró.



Por eso, concluyó: "El Bopreal no sería un problema si el BCRA fuera capaz de acumular reservas. Pero si hay menos inversión en conocimiento, menos inversión en infraestructura, menos capacidad de generar productividad. ¿Por qué habría de creer que vamos a ser capaces de producir más de aquello que le podemso vender al mundo, de competir en el mundo, si nos estamos debilitando desde nuestras capacidades productivas? Yo no la veo y ahí es donde empiezan los problemas más fuertes, y el problema va a empezar con el Bopreal cuando empiecen a vencer esos bonos".