
En medio de la polémica por el supuesto “video fake” de Luis Caputo junto a Alejandro Fantino en Neura, donde el Ministro de Economía anunciaba el advenimiento de “meses complicados” en materia económica, que –más tarde y por redes sociales- ambos personajes negaron la veracidad de las declaraciones y lo adjudicaron a un trabajo de “edición”; el oficialismo despide al superávit fiscal que venía ostentando. La Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) reveló que en junio las cuentas públicas cerraron un déficit financiero devengado de $2,7 billones.
La información fue confirmada por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) y se suma al alza de la inflación y la disparada del precio del dólar. Según los datos de la OPC el déficit primario fue de $1.019.024 millones que, al considerar compromisos de deuda por $1.724.756 millones, pasó a mostrar un desbalance financiero de $2.743.781 millones. Incidieron de manera negativa el final del impuesto PAIS y los aumentos en las prestaciones sociales del 4,6% en junio y las transferencias a las provincias 56,4%.
Una de las hipótesis que se barajan es que tanto el “video fake” entre Luis Caputo y Alejandro Fantino, así como determinadas expresiones tanto de Javier Milei como de algunos referentes del Gobierno, se trataron de operaciones que buscaron ejercer presión sobre gobernadores y legisladores en el marco de la posible aprobación de la repartición de fondos ATN, el proyecto de emergencia en discapacidad y jubilaciones; que –en línea con el discurso oficial- (de aprobarse) podrían explicar el regreso del déficit fiscal.
Según los datos relevados por la OPC, el gasto en personal pasó de mayo a junio de $1,1 billón a $1,5 billón, mientras que el de jubilaciones y pensiones pasó de $4,1 billones a $6 billones. Es decir que entre ambos conceptos el incremento del gasto fue de $2,3 billones en un solo mes. Según los datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso en junio el déficit primario fue de $1.019.024 millones que, al considerar compromisos de deuda por $1.724.756 millones, pasó a mostrar un desbalance financiero de $2.743.781 millones.
Después de cinco meses de superávit financiero, según el portal La Política Online desde el Ejecutivo aseguran que se trata de una excepción "estacional", pese a que el impacto marque la base monetaria creció 17,7% solo en junio, producto de estas erogaciones. Para los que sostenían que el equilibrio era innegociable, ese aumento del circulante es justamente el tipo de combustible que alimenta la inflación, que en junio tuvo un salto importante según sugiere el IPC de la Ciudad que se conoció este martes.
La eliminación del impuesto PAIS fue determinante para la caída de la recaudación del 0,6%, aunque también incidió la merma real del 12,9% en la recaudación del impuesto a las Ganancias, que golpea especialmente a las provincias. Entre los rubros que inclinaron la balanza hacia un resultado favorable figuran las retenciones con 16% porque el campo estaba en el trimestre de oro de liquidación, IVA 3,7% y Seguridad Social 25,4%.
Los números de la OPC anticipan las cifras oficiales, que se darán a conocer el próximo 14 de julio. El informe de la Secretaría de Hacienda cubre la administración central, no todo el sector público como en este caso, y se trata de cifras "base devengado" y no "base caja". Es decir, sobre los gastos hechos pero no necesariamente ya pagados, lo que implica que en la versión oficial, gracias a la contabilidad creativa, podrían maquillar este retroceso.