
El gobierno de Israel volvió a cometer un ataque injustificado y bombardeó de nuevo el norte de la Franja de Gaza, donde esta vez dañó la única iglesia católica de la región, asesinó a dos mujeres e hirió a varias personas, entre las cuales se encontraba el cura argentino Gabriel Romanelli, quien adquirió relevancia por su amistad con el papa Francisco.
En la parroquia bombardeada por Israel se refugiaban cerca de 500 y 600 personas, sin distinción de credos, tanto familias cristianas como musulmanas desplazadas por la guerra.
“La Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza se ha visto golpeada esta mañana por un bombardeo. Hay varios heridos en el lugar, entre ellos el párroco, Gabriel Romanelli. En este momento no hay muertes confirmadas”, indicó el Patriarcado Latino de Jerusalén en un comunicado publicado en su cuenta de Facebook.
El Patriarcado Latino de Jerusalén es la circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica para Tierra Santa (Israel, Territorios palestinos y Jordania) y Chipre. Está directamente sujeto a la Santa Sede. Desde el 24 de octubre de 2020 su patriarca, es decir su obispo, es el cardenal Pierbattista Pizzaballa, que fue uno de los papables del último cónclave.
El edificio de la parroquia sufrió daños estructurales. Luego de trascender la noticia sobre el inaceptable ataque, el ejército israelí envió un comunicado: “Las FDI están al tanto de los informes relativos a los daños causados a la Iglesia de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza y las víctimas en el lugar. Se están examinando las circunstancias del incidente”.
En el caso de las heridas del padre Romanelli, de 54 años, son en una de sus piernas y ya ha sido atendido en un centro de salud, según se conoció. Desde el Vaticano también confirmaron el ataque y remarcaron en la Igleisa "aún se alojan unas quinientas personas que huyen de la guerra" y que "habría sufrido varios daños".
Incluso la primera ministra de Italia y amiga de Javier Milei - defensor de Israel sin miramientos -, Giorgia Meloni, repudió que "los bombardeos israelíes contra Gaza han afectado a la Iglesia de la Sagrada Familia" y pidió el cese al fuego. "Los ataques contra la población civil que Israel lleva meses llevando a cabo son inaceptables. Ninguna acción militar puede justificar esta actitud", escribió la líder italiana en su cuenta en la red social X.
ROMANELLI Y SU RELACIÓN CON FRANCISCO
El sacerdote Romanelli nació en el barrio porteño de Villa Crespo y está a cargo de la única iglesia católica en todo el territorio de Gaza. Pertenece al Instituto del Verbo Encarnado (IVE), una congregación fundada en Argentina con presencia en distintos países de Medio Oriente. Tiene 54 años y desde hace más de 28 vive en la región, donde desarrolló su misión pastoral en Egipto y Jordania antes de llegar a su actual destino.
La Iglesia de la Sagrada Familia, ubicada en el corazón de Gaza, no solo ofrece un espacio para el culto, sino que también actúa como refugio ante la guerra que desde hace tiempo castiga a la zona. Romanelli acompaña a una pequeña comunidad cristiana conformada por católicos y ortodoxos.
Pese a este contexto bélico y las numerosas dificultades, el sacerdote continúa con su labor humanitaria y espiritual. Desde hace años, el templo -que ahora fue destruido por bombas- se transformó en un símbolo de esperanza para toda la región.
Mientras su salud se lo permitió, el papa Francisco llamaba todos los días a las 19 horas a la única iglesia católica de Gaza -Sagrada Familia- para hablar con su compatriota, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, e interiorizarse sobre la situación de los fieles y la población en general en esa región del mundo castigada por una guerra que ya ha durado demasiado tiempo.