
En medio de una semana marcada por la escalada del dólar, que llegó a los $1.380 en el mercado minorista y acumuló un alza del 14% en julio, el Banco Central endureció su política monetaria y elevó nuevamente los encajes bancarios, con el objetivo de absorber pesos del mercado y contener la presión cambiaria.
La medida fue formalizada este jueves mediante la Comunicación “A” 8289, y comenzó a regir desde este viernes 1° de agosto. Se trata de una modificación que incluso endurece la suba previa ya anunciada, en un contexto en el que el propio titular del BCRA, Santiago Bausili, reconoció que “quedaban excedentes en el sistema”
La modificación de los encajes, los cuales refieren al porcentaje de los depósitos que los bancos deben inmovilizar en el BCRA, impactan directamente en la cantidad de dinero circulante, tanto sobre las entidades financieras tradicionales como sobre las billeteras digitales. En este último caso, aunque se mantienen en el 45% para las cuentas a la vista, la proporción que debe integrarse en efectivo sube del 36% al 40%, mientras que la parte que se podía cubrir con bonos baja del 9% al 5%.
La medida también alcanza a los fondos comunes de inversión tipo “money market”, donde invierten los saldos de las cuentas remuneradas de las billeteras virtuales. En ese segmento, el encaje se duplicará, pasando del 20% al 40%. Esto afectará directamente los rendimientos que reciben los usuarios de apps como Mercado Pago, Ualá o Naranja X, entre otras. Con un mayor porcentaje inmovilizado, esas plataformas ofrecerán menores tasas de interés por los saldos depositados.
“Estamos notando que a los bancos les quedaba liquidez libre de sobra”, argumentó el presidente del BCRA, Santiago Bausili, al hacer oficial el anuncio durante una entrevista en el canal de streaming oficialista Carajo. La absorción de pesos vía encajes aparece como una herramienta ortodoxa que, si bien ayuda a contener la demanda de divisas, también impacta en la economía real al reducir el acceso al crédito y recortar los rendimientos para los pequeños ahorristas.
Uno de los objetivos centrales de la medida es unificar el tratamiento regulatorio de los depósitos, equiparando los requisitos de encaje para cuentas bancarias (CBU) y virtuales (CVU). “Desde agosto equiparamos los encajes, no hay más distorsiones desde el marco regulatorio”, explicó Bausili, y agregó que la suba de encajes también funcionará como “incentivo para que los bancos manejen un saldo de pesos en la cuenta corriente en el BCRA más alto de lo que tenían y, ojalá, más parejo a lo largo del mes”.