El abogado defensor de Mauricio Macri,
Pablo Lanusse, recusó al magistrado Martín Bava mediante dos presentaciones que realizó en el juzgado de Dolores en las que
argumentó que hay "prejuzgamiento y temor fundado de parcialidad" en la causa por espionaje ilegal a familiares de víctimas del hundimiento del submarino ARA San Juan que lleva adelante y solicitó que deje sin efecto la indagatoria hasta que ese planteo este resuelto y quede firme.
En el escrito indicó que
el juez "exhibe su carencia de mesura, prudencia, imparcialidad y serenidad" y pidió hacer operativa la garantía de ser oído por un juez imparcial. También indicó que se acredita "fundada y objetivamente el compromiso personal, cognitivo y emocional del Sr. Juez recusado, y su prejuzgamiento sobre los hechos materia de investigación, de los que se coloca en una situación próxima de víctima potencial", lo que sostiene el temor fundado de parcialidad.
Lanusse planteó que por cuestiones de decoro, economía procesal, recta administración de justicia, debido proceso y defensa en juicio que se encuentran involucradas y afectadas,
Bava debe "inhibirse" de seguir en el caso hasta que se resuelva si se aparta o no de la investigación, algo que si es rechazado por el magistrado será dirimido en la Cámara Federal de Mar del Plata y podría llegar a Casación Penal.
Para cerrar el defensor del ex presidente
sostuvo la "incompetencia manifiesta" del juzgado federal de Dolores para seguir en el caso "sin que esto signifique reconocer hechos ni responsabilidad alguna", ante lo cual
reclamó el pase a los tribunales federales porteños, con sede en Comodoro Py 2002, algo que la querella preveía junto con la conducta dilatoria del imputado que observan desde la denuncia presentada por la interventora de la AFI, Cristina Caamaño.
