25.10.2021 / Frente

Martín Guzmán: "El pueblo argentino pagó la campaña de Macri y estamos intentando refinanciarla en cuotas"

El ministro de Economía negó una futura "devaluación" al asegurar que además "el BCRA está comprando dólares", hay "superávit comercial" y "las exportaciones vienen creciendo”. Vinculó la deuda con la inflación y enfatizó que acordar con el Fondo es “el primer paso” para una deuda “sustentable”.




En el marco de una charla organizada por la revista Crisis y el Proyecto Ballena en el Centro Cultural Kirchner, el ministro de Economía, Martín Guzmán, se refirió con definiciones políticas a la deuda de la Argentina con el Fondo Monetario Internacional y las negociaciones que se llevan a cabo para intentar componer esa problemática heredada, además de otras cuestiones económicas como el tipo de cambio y la inflación, entre otras

"El FMI financió la campaña de (el expresidente, Mauricio) Macri. El pueblo argentino pagó la campaña de Macri y estamos intentando refinanciarla en cuotas que no impidan el desarrollo de nuestro pueblo", explicó el funcionario respecto de las negociaciones que lleva con el organismo que conduce Kristalina Georgieva. 

En ese sentido, agregó que "desde el lado del FMI, fue un préstamo político", y agregó que "el Fondo no lo va a reconocer" y "Estados Unidos tampoco", pero que "resulta ser que quien era el director ejecutivo dijo públicamente que éste había sido un préstamo de apoyo al gobierno anterior".

"Hay un poder de lobby que busca asustar y nosotros no vanos a entrar en esa", advirtió el ministro de Economía y sostuvo además que el Gobierno busca "un acuerdo conveniente para la Argentina" y "que la carga sea sostenible".

"Es tan grande la carga de la deuda que va a llevar bastantes pasos resolver este problema", señaló y por eso advirtió que se trata del "principal problema que le deja el gobierno de Macri a la Argentina".

Asimismo añadió que otra dificultad encontrada es que "el uso de los fondos fue absurdo, de esos USD 45 mil millones, 21 mil millones se usaron para pagar deuda insostenible a acreedores privados en deuda extranjera, y 24 mil millones de dólares financiaron salidas de dólares".

"En 2018 cambian las expectativas, el mundo dijo 'se acabó, esto no va más'. Ahí es cuando el modelo entra en crisis y ahí queda en evidencia que ese modelo económico no funcionaba", cuestionó Guzmán sobre la gestión anterior, y añadió. "La Argentina quedó rehén de las expectativas predominantes del sistema financiero internacional, una total irresponsabilidad. La única lluvia que hubo fue de capitales especulativos".

En un segmento de sus definiciones respecto de la deuda, Guzmán sostuvo que la actual relación con el Fondo es “anómala”, en el marco de que el organismo debería aparecer en escena cuando un país tiene problemas de balanza de pagos, pero en el caso argentino la deuda con el FMI es justamente el problema de balanza de pagos.

El ministro definió a esta situación como cuando en un país salen más dólares de los que entran y expuso que hoy no ocurre. “Hoy Argentina tiene superávit comercial y muchos dicen que se viene una devaluación y decimos que no va a haber devaluación. El BCRA está comprando dólares, tenemos superávit comercial y las exportaciones vienen creciendo. Hay más resiliencia. El problema de balanza de pagos es el FMI: que está en la Argentina porque lo trajo Macri”.

Por eso dijo que el desafío es “lograr que el FMI deje de ser una carga desestabilizante, sobre la base de nuestra programación económica”, pero no es una negociación sencilla, porque se trata de un organismo que tiene 190 países miembros.

“Acá lo que hay que entender es que el rival también juega. Acá estamos hablando de la relación de un Estado Nación y todos los Estados Nación del mundo. Estamos hablando de la integración de la Argentina en el mundo. Necesitamos una Argentina apropiadamente integrada al mundo; no como hizo el gobierno de JXC. Que esté integrada de una forma que favorezca las oportunidades de desarrollo de nuestra economía real”, afirmó.

En ese marco, reiteró que lo que se necesita es "un acuerdo favorable para la Argentina, que la carga sea sostenible", pero que "es tan grande el volumen de la deuda, que va a llevar muchos pasos lograr que la deuda sea sostenible”. La peor alternativa, concluyó, “es un mal acuerdo, que socave las posibilidades de la Argentina y que después no se puede cumplir” y que "acabar con la dependencia del FMI es un acto de soberanía".