El escándalo por los encuentros y vínculos de tres de los cuatros funcionarios judiciales que investigan y juzgan a Cristina Kirchner en la causa y el juicio oral por la obra pública de Santa Cruz con
Mauricio Macri y Patricia Bullrich cuando ya tenían el expediente en sus manos no para de escalar.
Es que tras ser recusado por Carlos Beraldi, el abogado de la Vicepresidenta, el juez del Tribunal Oral Federal 2, Jorge Gorini, trató de explicar en vivo los supuestos motivos que lo llevaron a reunirse en 2018 con la entonces ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en la Casa Rosada, pero en lugar de aclarar, oscureció.
La recusación y las explicaciones del magistrado tuvieron que ver con que, al confirmarse que se encontró con la titular del PRO cuando ya tenía la causa "Vialidad" y por tratarse de una de las denunciantes, fue cuestionado por temor a que pueda ser parcial a la hora de evaluar el caso.
Tras escuchar unas primeras palabras y el pedido de Beraldi,
Gorini alegó que se reunió con Bullrich por dos razones: el primero de los encuentros, dijo, fue
evitar que trasciendan imágenes de los ex funcionarios detenidos como pasó con Amado Boudou, mientras que el segundo fue para
renovar su custodia personal tras un caso de inseguridad del que dijo haber sido víctima en el marco del expediente por el encubrimiento del Atentado a la AMIA.
El problema de la argumentación de Gorini es múltiple. En primer lugar, que no mantuvo dos reuniones de esta índole, sino tres. Segundo, que solo dos de esos encuentros fueron con Bullrich en persona. Tercero, que el único en el que habló de su "seguridad personal" fue el primero, en 2016, y no participó la ex ministra de Macri. Cuarto, que las fechas acerca de lo de Boudou no coinciden. Y quinto, que cuando el abogado de Cristina le enrostró esas contradicciones lanzó insólitas respuestas.
Tal como publicó Página 12,
del Registro de Audiencias de los funcionarios surge que en 2018, cuando ya tenía asignada la causa "Vialidad" de la que fue denunciante Bullrich, figura que Gorini y la dirigente PRO se encontraron para tratar un tema legislativo vinculado al delito de narcotráfico.
"Una de ellas (reuniones) responde al siguiente motivo: se habían difundido imágenes del entonces ex vicepresidente Amado Boudou en pijama, descalzo, en momentos a proceder a su detención. Frente a eso, nosotros habíamos resuelto las sentencias de la Tragedia Once, esto había sido recusado en Casación y quedaba pendiente un recurso de queja en la Corte Suprema. Ante la inminencia de la resolución de esa incidencia y la posibilidad de que hubiera que materializar las detenciones de todas las personas que habían sido condenadas, solicité una entrevista con la ministra para manifestarle como presidente del Tribunal para que no se difundiera material de las personas al momento de ser detenidas", afirmó Gorini acerca del encuentro de 2017.
Pero luego el juez habló de las supuestas razones de la reunión con Bullrich en 2018. "El segundo motivo ocurre con motivo de un hecho de inseguridad personal que sufrí a consecuencia de mi participación en un juicio oral que fue el encubrimiento del atentado a la AMIA. Sufrí personalmente un hecho de seguridad muy sugestivo, por el cual me reuní con la entonces ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez. La ministra puso un dispositivo de seguridad personal a cargo de la Policía Federal Argentina. De manera posterior, se produce la transferencia de la policía Federal a la Policía de la Ciudad. Entonces quedó medio en stand by de mi seguridad cuando el juicio estaba todavía en ciernes. La amenaza potencial del hecho de inseguridad seguía vigente. Me reuní con la ministra con el objetivo de que se mantenga mi protección", dijo.
Pero
en el Registro Único de Audiencias figuran tres visitas de Gorini y fue la primera, de 2016, en la que se reunió con el entonces Subsecretario de Articulación Judicial, Guillermo Soares Gache, para dialogar acerca de su seguridad personal.
La segunda reunión fue con Bullrich en junio de 2017 cuando hablaron, según el registro, de temas de "corrupción" en las fuerzas de seguridad, encuentro que según Gorini habría sido precisamente por lo de Boudou.
El último encuentro que figura fue en agosto de 2018 para dialogar, según el registro oficial, de "proyectos de ley para la lucha contra el narcotráfico". Se trata del que Gorini atribuye a su "seguridad personal".
Ante estas contradicciones, el abogado Beraldi, en tono respetuoso, le respondió. "Muchas gracias, le agradezco la sinceridad y la espontaneidad con la que nos habló, pero le quiero hacer notar que la reunión a la que hice referencia, la de 2018, habla de proyectos normativos y nada tiene que ver con una cuestión personal. No sé si habrá habido alguna otra reunión, pero no se refiere a la que puntualmente estoy haciendo mención", le dijo.
Gorini lo interrumpió.
"No, es ésa, lo que pasa es que el motivo por el cual se convocó no sé qué nombre asentaron ahí. El motivo no lo conozco. El objetivo fue ese (en referencia a lo que él explicó)", dijo.
Beraldi le marcó que no era su intención "polemizar" y que "más allá de la estima" que pueda tener por él, iba a formalizar la recusación por vía oral o a través de un escrito, si el tribunal así lo determinaba.
RARA JUSTIFICACIÓN PARA REUNIRSE CON BULLRICH POR BOUDOU
Gorini dijo que se juntó en 2017 con Bullrich para evitar que se conozcan imágenes de las detenciones por la causa de la tragedia Once, como pasó con el ex vicepresidente, y que no vuelva a haber difusión como en ese caso.
Pero las fechas de las reuniones dificultan creerle. Según el registro, Gorini se encontró con un funcionario de seguridad en 2016, antes del encarcelamiento de Boudou, por lo que esa cita queda descartada.
Luego se reunió con Bullrich en junio de 2017 y en agosto de 2018, pero a Boudou lo metieron preso en noviembre de 2017, cinco meses después del primer encuentro del juez con la ministra y 10 meses antes del segundo.
Por otra parte, Gorini explicó que la intención tenía que ver con la inminencia del fallo de la Corte Suprema por los recursos que presentaron por la Tragedia de Once y las posibles detenciones, de manera que se evitara que sucediera lo mismo que con Boudou. Sin embargo, la Corte Suprema resolvió las condenas por la Tragedia de Once en septiembre de 2020, dos años después de la última reunión con Bullrich. Demasiada antelación o desconocimiento de fechas para un juez.