El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi rechazó todos los pedidos que hizo la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, entre los cuales se destaca la negativa a detener a tres integrantes de Revolución Federal por su presunto vínculo con el intento de homicidio que sufrió hace cuatro meses.
La interpretación del magistrado de Comodoro Py es que la situación de los acusados no cambió desde principios de noviembre cuando fueron liberados por la Cámara Federal, en otra decisión polémica, por lo que no hay elementos nuevos para restringir su libertad, según consideró.
La ex presidenta había pedido la detención de
Jonathan Morel, Leonardo Sosa y Gastón Guerra, integrantes de Revolución Federal, por medio de sus abogados. "De las conversaciones descubiertas entre estos integrantes de Revolución Federal surge que planeaban juntar dinero para contratar un sicario.. El dinero se encontró y el sicario está preso", había argumentado.
El juez también rechazó otros pedidos de CFK, como la citación a indagatoria de
Rossana Caputo - de la familia del ex ministro macrista
Luis Caputo y del "amigo del alma" de
Mauricio Macri, Nicolás Caputo - por el financiamiento al grupo; el allanamiento y el secuestro del celular de
Ximena De Tezanos Pinto, la vecina de la ex mandataria en el edificio de Recoleta.
Llamativamente, Martínez de Giorgi sí accedió a incorporar a la causa las declaraciones de testigos en el expediente por el intento de homicidio de la vicepresidenta y que se analicen las redes sociales de De Tezanos Pinto.
"En lo atinente a los pedidos de detención de Jonathan Morel, Gastón Guerra y Leonardo Sosa, cuya libertad ambulatoria ya ha sido decidida por la Cámara del fuero y sin que se advierta la modificación posterior de su comportamiento procesal en un sentido que altere los fundamentos del Superior, no ha lugar", fue el argumento del juez para rechazar el pedido de detenciones.
Según la agencia Noticias Argentinas, Martínez de Giorgi se tomó el permiso de sugerirle a la querella que representa a la Vicepresidenta, encabezada por los abogados
José Ubeira y Marcos Aldazábal, que peticione las detenciones a la jueza
María Eugenia Capuchetti, quien tiene a su cargo la investigación por el intento de asesinato y ni siquiera quería investigar a Revolución Federal. Se patean la pelota uno al otro.
En el expediente contra Revolución Federal se investiga al grupo por incitación a la violencia en sus actividades públicas, como una marcha en la que llevaron una guillotina.
Martinez de Giorgi detuvo el 20 de octubre a los integrantes Morel, Guerra, Sosa y
Sabrina Basile, hija del ex director técnico de la selección argentina Alfio “Coco” Basile. El 1 de noviembre la Cámara Federal los liberó. Los cuatro están procesados por el delito de incitación a la violencia pública.
El grupo tenía en sus redes sociales mensajes violentos y de deseos de matar a Cristina. “Al leer los informes realizados por la Policía de Seguridad Aeroportuaria sobre los teléfonos secuestrados en esta causa, lo que primero surge es la evidente cercanía entre la conducta de los miembros de Revolución Federal y sus allegados con el atentado sufrido por Cristina Fernández de Kirchner el 1 de septiembre”, señalaron en el escrito los abogados de CFK.
Y agregaron que
“de las conversaciones descubiertas entre estos integrantes de Revolución Federal surge que planeaban juntar dinero para contratar un sicario… El dinero se encontró y el sicario está preso”.