Mientras miles de personas que tomaron los muy promocionados créditos hipotecarios UVA durante el gobierno de Mauricio Macri reclaman por estafa, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) avanzó en una medida que dejará todavía más desprotegidos a los futuros tomadores de estos préstamos en beneficio de la rentabilidad de los bancos.
El BCRA decidió eliminar la norma que obligaba a los bancos a extender el plazo del crédito en el caso de que la evolución de la inflación superase a la de los salarios. En su lugar dispuso que "los bancos deberán poner especial atención a la relación cuota/ingreso" al momento de otorgar el crédito ante la eventualidad de que la UVA crezca por encima de los sueldos.
La eliminación de esta cláusula no rige para los préstamos que ya fueron otorgados. Por lo tanto, serán los nuevos préstamos que se otorguen a partir de ahora los que no contarán con esta salvaguarda que beneficiaba a los deudores.
La norma derogada obligaba a los bancos a ofrecerle a los tomadores de préstamos UVA "extender el número de cuotas originalmente previstas cuando el importe de la cuota a pagar supere en 10% el valor de la cuota que resultaría de haber aplicado a ese préstamo un ajuste de capital por el Coeficiente de Variación de Salarios (CVS) desde su desembolso".
En ese caso, si la cuota calculada por inflación (UVA) superaba en un 10% a la cuota calculada por salarios (CVS), el tomador del préstamo podía optar por alargar "hasta 25% el plazo original del crédito", de manera de que la cuota no fuese tan gravosa.
Dictada en 2018 cuando se disparó la inflación sobre el final de la gestión de Macri, esta cláusula funciona como una cobertura para los deudores que enfrentaban cada vez más dificultades para la disparada de las cuotas. Es que habían quedado atrapados en una trampa que siguen denunciando, pagaban todos los meses cuotas cada vez más altas al mismo tiempo que sus deudas (el capital se indexaba por inflación) eran cada vez mayores.
De esa forma, los bancos ya no estarán obligados a ofrecer esta protección a sus clientes y cada banco podrá ofrecer (o no) su propio método de protección para quienes tomen un crédito para comprar una vivienda.