
La marcha habitual de cada miércoles impulsada por los jubilados tendrá el apoyo de distintos grupos como los trabajadores del Garrahan, científicos, migrantes y grupos feministas por el aniversario de Ni una menos, los cuales se concentrarán frente al Congreso desde las 16, con el objetivo de hacer más fuerte el reclamo bajo el lema “contra el ajuste y la crueldad”.
La convocatoria reunirá a trabajadores del Hospital Garrahan, la emergencia en discapacidad, los 10 años del colectivo Ni Una Menos, el tratamiento de la Moratoria Previsional, el incremento de jubilaciones y también por la reforma migratoria. Además, un grupo de científicos argentinos, muchos de ellos empleados por el Conicet reclamarán recortes presupuestarios.
Desde las redes sociales de Ni una menos, comunicaron que formarán parte del reclamo de jubilados y decidieron pasar la marcha que todos los años se realiza el 3 de junio, para el miércoles, con el fin de hacer más fuerza. “Unir las luchas contra el ajuste”, escribieron.
En la misma línea, los trabajadores del Garrahan, quienes también se movilizarán este jueves 5 de junio, decidieron sumarse a la lucha y reclamarán por salarios dignos luego de haber rechazado la propuesta del Gobierno. “Les pedimos que nos acompañen en una nueva movilización pacífica en defensa de nuestro hospital”, indicaron.
También, grupos de científicos empleados por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) reclaman por recortes presupuestarios, congelamiento de sus salarios y falta de subsidios para la investigación. “Nos encontramos en las calles”, anticiparon.
Por último, estarán presentes colectivos de migrantes en protesta a la reforma migratoria que impulsó el gobierno de Javier Milei, que limita el acceso a la ciudadanía, educación y sistema de salud.
Esto se dará en el marco de la marcha número 17 de jubilados en lo que va del 2025, justo a un día del anuncio de la recuperación de Pablo Grillo, el fotógrafo que fue herido por los gendarmes. Cabe destacar que se aplicará el protocolo antipiquete de Patricia Bullrich, por lo que la represión policial está garantizada.