Insólito. Daniela Batlle Casas, influencer santafesina y exasesora legislativa, rompió el silencio tras la viralización de su paso por el Congreso como trabajadora en el equipo del diputado de Juntos por el Cambio, Gerardo Milman. Su descargo llegó luego de recibir duras críticas en redes sociales, que la vincularon con el intento de asesinato a la expresidenta en septiembre de 2022.
“Me están matando en Twitter. Me veo obligada a responder”, comenzó la joven en un video subido a sus cuentas. “Soy abogada, trabajé durante ocho meses en 2022 y renuncié en octubre, antes de que se conocieran los escándalos vinculados al atentado. No tengo nada que ver, no fui parte de eso”, aseguró. Su aclaración generó aún más repercusiones, ya que el atentado ocurrió un mes antes de su salida del cargo.
Batlle Casas intentó tomar distancia del episodio y del clima político actual. “Me mudé a Buenos Aires para progresar, pero no encontré lo que buscaba y por eso renuncié. Trabajo como cualquier persona”, afirmó, al tiempo que apuntó contra el “odio” en redes sociales. “Si son de los que tiran hate, piensen por qué lo hacen. No ataquen a alguien solo porque trabajó con un diputado”, cuestionó.
Con un perfil mediático construido a partir de su presencia en TikTok y su participación en el programa “Los 8 escalones del millón”, Batlle Casas ya había tenido roces con la política: en 2021 fue precandidata a concejal por Juntos por el Cambio en Santa Fe. También fue noticia ese año por asistir a una fiesta clandestina en pandemia.
Cabe señalar que causa judicial por el atentado a la vicepresidenta sigue su curso. En las últimas semanas, el diputado Milman —señalado desde el inicio por sus vínculos con sectores del PRO y por una polémica frase previa al ataque— finalmente entregó la clave de su teléfono celular a la Justicia. Aunque Batlle Casas no está imputada ni mencionada formalmente, su pasado como asesora volvió a ser objeto de debate público.