En los últimos meses hubo un notable avance del virus conocido como Dengue, transmitido por los mosquitos hembras de la especie Aedes aegypti y en menor medida de Aedes albopictu, que también contagian la Fiebre Chikungunya, el Zika y la Fiebre Amarilla.
En dialogo con Política Argentina un especialista en el tema explica que, teniendo en cuenta el ciclo de vida del mosquito, que en sus 30 días de vida pone alrededor de 2000 huevos, los cuales pueden sobrevivir un año, la fumigación tiene “efecto muy reducido” y que
la “verdadera acción no debe interrumpirse en ningún momento”.
En este sentido señala que se necesita de una efectiva y sostenida acción interdisciplinaria entre Educación, Salud y Medio Ambiente; participación comunitaria previa instrucción por personal capacitado;
garantizar servicios básicos como el agua potable y el tratamiento de aguas residuales y la efectiva gestión de residuos sólidos y neumáticos usados, entre otras cosas.
Además agrega que “
se necesita que la descacharrización sea efectiva, general e ininterrumpida durante todo el año y no parcial, compulsiva y absolutamente ineficaz como hasta el momento”. Por ello denuncia que “las fumigaciones solo sirven como propaganda engañosa de una campaña contra el dengue que no existe” dado que si no se realiza una prevención, con las altas temperaturas, el mosquito comienza nuevamente a transmitir el virus.
El promedio de vida de una hembra, la que transmite el virus, es de 30 días y deposita alrededor de 2000 huevos en recipientes artificiales como latas, cubiertas en desuso, drenajes pluviales tapados. Por su parte dentro de las viviendas, es muy común encontrar larvas en floreros y plantas acuáticas, así como en los lugares donde se almacena agua (tachos, botellas, cisternas, barriles, tanques, etc).
Por esta razón el especialista denuncia que desde el Gobierno no se están llevando adelanta las medidas necesarias para prevenir el desarrollo de la epidemia.
