Luego del fracaso de la reforma electoral, el oficialismo ya piensa en una nueva alternativa para poder tener una herramienta de poder de cara a las elecciones legislativas del 2017 y la vía es nada más ni nada menos que la judicialización de la política. Esta vez el objetivo es quedarse con la Justicia Electoral Bonaerense.
Hasta el 30 de noviembre, la jueza Servini de Cubría, de la Capital Federal, fue designada por el Consejo de la Magistratura para subrogar la competencia electoral bonaerense, que, en rigor, le correspondía ejercer al titular del Juzgado Federal 3, de Ernesto Kreplak. Pero la subrogancia de Servini de Cubría se extendió del 30 de noviembre hasta el 31 de marzo, prácticamente la fecha de inicio de la parte jugosa del calendario electoral.
Ante esta situación el juez federal del fuero criminal y correccional de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, presentó “espontáneamente” el 14 de diciembre una nota al Consejo en la que pedía el traslado de competencia a La Plata.
La mayoría que el oficialismo tiene en el Consejo de la Magistratura pidió su opinión a la Cámara Federal y esta no presentó objeciones pero marcaron que es competencia del Consejo velar por la legalidad del traslado. Pero los votos en disidencia, de los jueces Schiffrin, Calitri y Vallefin subrayaron las graves irregularidades que pesan sobre la maniobra. Por ejemplo, que ya existe un concurso abierto -trámite número 348, sospechosamente demorado luego de haber sorteado un jurado- para designar un juez al frente del Federal 1 de La Plata, y que cualquier traslado debe hacerse dentro de la misma jurisdicción y la misma competencia. Por esos motivos, llegaron a tachar por “inconstitucional” la petición del Consejo de la Magistratura.
Pero esto no fue suficiente, ya que se espera que esta semana la Comisión de el visto bueno al pedido de Culotta y que a comienzos del año próximo se resuelva su designación en un Plenario. Para lograrlo el Gobierno solo necesita mayoría simple.
¿Quién es el juez Culotta? Fue denunciado en el Consejo de la Magistratura por Estela de Carlotto, que lo acusó, en su paso por la Sala I de la Cámara Federal de San Martín, de haber tergiversado pruebas y haber invocado hechos falsos durante el juicio contra el ex secretario del Ejército Eduardo Alfonso, en 2011, por delitos de lesa humanidad, con la intención de garantizar su impunidad.
Uno de los casos más importantes a su cargo fue el del asesinato del ex agente de la SIDE, Pedro Tomás “El Lauchón” Viale, ya que el juez Culotta había ordenado el allanamiento del domicilio del ex espía por una investigación de narcotráfico a su cargo. El Grupo Halcón irrumpió y acribilló al ex agente quien se defendió respondiendo los disparos pero falleció al instante.
Su relación con Mauricio Macri
A Culotta se le atribuye una estrecha relación con el macrismo y un viejo paso por el colegio Cardenal Newmanm.
Además el juzgado Federal Nº1 de La Plata tiene fuerte competencia electoral y múltiples atribuciones con amplios poderes sobre la elección. Puede, por ejemplo, impugnar y habilitar candidaturas. Podría, en tal caso, impedir la presentación de un candidato o de un partido.
Esta situación hizo entrar al peronismo en alerta ya que de esta forma se podría proscribir una eventual candidatura de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires que se celebrarán en 2017.
