Una vez más, la realidad estadística de su propia gestión desmiente la interminable idea de Cambiemos de que la crisis llegó a su techo y empieza el repunte:
el INDEC informó que la inflación de abril fue de 3,4% y generó una curiosa sensación de festejo en el Gobierno por el leve retroceso mensual que eso significa, pero el número se interpreta realmente grave al considerar que se alcanzó un 15,6% sólo en el primer cuatrimestre del año y que se trata de un nuevo récord interanual desde que Mauricio Macri es presidente con un 55,8% que cada vez se acerca más a la salida de la hiper de 1992.
De esta forma, los precios minoristas avanzaron un 3,4% en abril, motorizados principalmente por el incremento registrado en el rubro más relevante de la medición, Alimentos y Bebidas, pero también con una fuerte suba en ropa, hogar y restaurantes.
En el caso de la comida, cuya ponderación es mayor en la canasta de bienes y servicios de las franjas de menor poder adquisitivo, el acumulado interanual alcanzó una cifra escandalosa: un 66,2%, un incremento desmesurado para un tercio de la población argentina que vive en la pobreza, mientras que el Gobierno habla de "alivio" por los "Precios Esenciales".
Pese al retroceso en la inflación mensual, desde el 4,7% de marzo,
en el acumulado anual llega a un nuevo máximo en la en la gestión de Macri, de 55,8% en los últimos doce meses, y se trata de la tasa más alta desde enero de 1992 cuando la salida de la hiperinflación puso este índice en un 77% anual.
La tasa de inflación anual hasta abril de 2019 más que duplica la de 2018: un 55,8% frente a un 25,1%, según el INDEC.
Asimismo,
en el acumulado de los primeros cuatro meses de 2019 llegó a 15,6%, frente a un 9,6% de enero-abril de 2018. Por lo tanto, la tendencia en el primer tramo de este año es aún seis puntos mayor a la de 2018, que en 12 meses sumó un 47,6%, la más elevada en 27 años.
