Los
curas villeros salieron este viernes al cruce del proyecto de ley para despenalizar el aborto. Aseguraron que que para las mujeres de los barrios pobres “
es particularmente trágico abortar y, generalmente, lo viven con una profunda humillación, como una negación de sus convicciones más íntimas”.
En una conferencia brindada en la Villa 21-24 de Barracas, enfatizaron: “
Muchas veces los organismos financieros que prestan dinero ‘sugieren’ políticas de control del crecimiento de la población, que apunta directamente a nuestras villas y barrios populares, donde en vez de reducir la pobreza se reduciría la cantidad de pobres”.
Encabezados por el padre "Pepe" Di Paola, inistieron: “
Las mujeres de nuestros barrios son profundamente progresistas; no se dejan seducir por el individualismo y asumen en sus decisiones los valores de la comunidad”.
“Cuando una mujer humilde de nuestros barrios va a hacerse la primera ecografía no dice ´vengo a ver cómo está el embrión o este montón de células’, sino que dice `vengo a ver cómo está mi hijo’”. Y se preguntan: ¿Qué solidez puede tener entonces la defensa de una vida humana. Si una ley puede definir en qué momento puede ser eliminada o no”, analizaron.
Ademas, Di Paola lamentó y cuestionó que "
ciertos comunicadores hablan de las provincias del norte lamentando su religiosidad como si vivieran en un atraso, como si los de la Capital y el Gran Buenos Aires tuviéramos la justa”.
“Comprendemos que está en juego la salud, pero también comprendemos que no se puede alcanzar la salud descartando a otros ser humano”, concluyeron.