14.06.2020 / Espionaje ilegal

Quién es Susana Martinengo, la funcionaria y amiga de Macri que recibía informes de espías en Casa Rosada

Acompañó al ex jefe de Gobierno porteño en la Ciudad, es armadora PRO, íntima de la ex familia presidencial y desde 2015 estaba a cargo de Documentación Presidencial. A cambio de casi $100 mil mensuales, recibió 12 veces a la banda de espías en Casa de Gobierno, en el Área Presidencia. También iban a comer. Los "pinchados": entre otros, CFK y Santilli, con razones hasta personales.




Según la teoría académica consensuada como correcta acerca de cómo redactar notas periodísticas los hechos más trascendentes para los intereses de la audiencia -la sociedad toda, eventualmente- deben ubicarse en la cabeza del artículo -primer párrafo-, entonces bien: diversos integrantes imputados en una causa de espionaje ilegal a políticos durante la gestión de Mauricio Macri iban a comer y fueron recibidos 12 veces en la Casa Rosada por Susana Martinengo, funcionaria de máxima confianza política y personal del ex presidente, para entregarle informes de inteligencia sobre Cristina Fernández de Kirchner y Diego Santilli, entre otros

El 8 de marzo, tras polémicas negociaciones, el imputado por tráfico de narcóticos Sergio "Verdura" Rodríguez se entregó al juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena. Declaró que trabajaba, entre otras cosas, para la AFI, de la mano del abogado y agente Facundo Melo. Éste fue allanado, y de su celular surgieron dos grupos de WhatsApp de la banda de espionaje. En uno de esos -SuperMarioBros- estaban los policías de la Ciudad asignados a la ex Side Jorge Sáez y Leandro Araque. Ambos también fueron allanados y tenían contacto directo con la Presidencia de la Nación a través de Martinengo. 

Melo, Areque, Sáez y Miguel Alfonso -un espía y ex policía de la Federal que estuvo infiltrado en La Cámpora, militó en Cambiemos y hasta apareció en Telenoche haciéndose pasar por cartonero- estuvieron 12 veces en la Casa Rosada reunidos con esta ex funcionaria de extrema confianza de Macri. Los datos surgen de una presentación realizada por Carlos Beraldi, abogado de la vicepresidenta, principal víctima del espionaje. En el texto, presentado este viernes ante Villena, se tomó la información surgida del registro de entradas de la Casa Rosada y publicada por Poder Ciudadano. Es decir, es información oficial. 

Según la presentación de Areque ante la Comisión Bicameral de Seguimiento de los Organismos de Inteligencia, también se reunían a comer. Para poder hacer esa declaración, el agente tuvo que pedir el levantamiento del secreto al que está obligado por ser orgánico de la AFI. El presidente de la Nación, Alberto Fernández, delegó la decisión en la titular de la central de inteligencia, Cristina Caamaño, quien lo relevó del secreto por tratarse de operaciones presuntamente ilegales y que por lo tanto el organismo no puede encubrir delitos.

En esa presentación, como reveló Página 12, Areque reconoció que Martinengo sabía -entre otras cosas- que la banda de espías seguía y producía material fotográfico del vicejefe de Gobierno porteño, Santilli. El argumento formal era que lo investigaban por enriquecimiento ilícito, pero Araque soltó otras dos razones entre insólitas y graves: que Macri desconfiaba de Santilli porque era "moyanista" y que en el espionaje había incluso una razón personal.



Es que, siempre según Araque, uno de los que le daba órdenes para estas operaciones era Martín Terra, amigo del titular de la AFI, Gustavo Arribas. Terra es también el ex marido de Analía Maiorana, actual esposa de Santilli. ¿Instrucciones personales? En cualquier caso, el agente investigado dijo que las razones por las que seguía al "Colorado", como le dicen al número dos del Poder Ejecutivo porteño, es porque es "moyanista" y por eso "nunca quiso ir contra el camionero".

Areque también admitió que siguió a Monzó, Massot y al periodista Rodis Recalt, aunque a éste último se negó a robarle el celular como le pedían. También reconoció que la banda le hizo inteligencia al dirigente de la Uocra de La Plata, Juan Pablo "Pata" Medina.

En su testimonio ante la comisión, Araque respondió preguntas de los seis diputados y senadores que se hicieron presentes. Un dato curioso, o que en realidad genera curiosidad respecto de las futuras declaraciones del involucrado, es que durante su ponencia el agente también se refirió a las tareas de inteligencia sobre el ex ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, actual jefe de la bancada PRO en Diputados e integrante de la comisión Bicameral de Inteligencia. Aparentemente, la banda pretendía averiguar sobre su relación con Hugo Moyano. El tema "moyanismo", presente al igual que con Santilli.


LOS ESPÍAS, EN LA CASA ROSADA DE MACRI

P12 relevó los encuentros entre los agentes de la AFI y Martinengo:

- Araque, dueño dl celular con centenares de fotos, diálogos y videos de las operaciones, ingresó a Casa Rosada el 15 de mayo de 2018 a las 15.08 y salió a las 17.15, o sea más de dos horas. La reunión se hizo en la oficina de Martinengo y estuvo con Alfonso.

- Dos meses después, el 18 de julio, Araque volvió dos horas a la oficina de Documentación Presidencial.

- La tercera visita fue record: el 6 de septiembre entró 14.04 y salió a las 23.59, casi diez horas.

- La cuarta fue el 1 de noviembre.

- La quinta fue el 14 de diciembre, en este caso con Jorge Sáez.

- En la sexta reunión, el 18 de diciembre de 2018, siempre en la oficina de Martinengo, participó también una mujer llamada Noelia Belén y un tal Juan José Ferreyra, que sería Juan Jorge Ferreyra, ex militar, que trabajó en el gobierno porteño en épocas de Macri. Ferreyra fue, además, candidato del carapintada Aldo Rico en San Martín.

- No dejaron pasar mucho tiempo y el 9 de enero de 2019, los tres sindicados en la causa de Lomas, Araque, el abogado de barras Melo y Sáez, entraron juntos a Casa Rosada y se fueron también juntos.

- Otra vez había mucha premura, en 20 días tienen tres reuniones: el 18 de enero, el 29 de enero y el 6 de marzo, vuelve a entrar Araque a Casa Rosada, una vez solo, una con Melo y otra con Sáez.

- Por último, el 6 de junio de 2019 hubo una reunión que agrupó a más personas. Estuvieron Martinengo y Araque, como siempre, pero también Romagnoli, Maximiliano Magistrello, Elba Masino, Federico Mastropierro y Fernando Scanavino. Según señala el diario La Nación, Scanavino es fundador de la ONG Juntos por el Trabajo en Libertad, de la que también formaba parte Silvina Martínez, abogada de Margarita Stolbizer. En el escrito de Beraldi, aunque no se explica el contenido, hay un hecho consignado en la causa de Lomas, el episodio número 9, en el que hay referencias a Martínez y Stolbizer.


MARTINENGO, LA POLIFUNCIONAL

La funcionaria de máxima confianza de Macri era la encargada de recibir la correspondencia para el ex mandatario. Pero no era lo único que recibía en la Unidad Presidencia: también habría sido uno de los vínculos con los agentes que durante la anterior gestión realizaron espionaje a políticos y dirigentes de la oposición y hasta de Juntos por el Cambio.

Según se desprende de la causa que tramita en Lomas de Zamora, hay tres fuentes para corroborar esto: chats de Whatsapp de distintos espías con Martinengo en los que coordinaban citas y entrega de información; los 12 ingresos y egresos formales de Casa Rosada de los agentes; el relato de -hasta ahora- uno de ellos ante los legisladores de la comisión de seguimiento de la inteligencia nacional. 

Martinengo no conoce a los Macri desde hace poco. Acompañó a Mauricio desde la Jefatura de Gobierno porteño, lugar en el que fue su secretaria. Cuando el líder PRO llegó al gobierno nacional, se hizo cargo de la oficina de Documentación Presidencial desde diciembre 2015 hasta el 17 de febrero de 2020, aunque dejó de ir a su oficina días antes de la asunción de Alberto Fernández. Por esa tarea se llevó un jugoso salario neto de $88.243,19.

La ex funcionaria no dudaba en mostrar su cercanía con Macri: compartía fotos en sus redes sociales junto al ex presidente, e incluso, con su hija Antonia. 

En la campaña presidencial 2015, Martinengo fue una de las referentes del PRO en el distrito de General San Martín. Coordinaba la generación de actividades y la llegada de dirigentes nacionals o provinciales a ese distrito. Participaba, incluso, de los actos. 

También, a pesar de no ser candidata, adquiría gran protagonismo en estas recorridas, como lo fue la visita de Jorge Macri en plena campaña electoral.

Para las presidenciales 2019, en las que Mauricio Macri buscó la reelección pero no la consiguió, Martinengo dejó un poco de lado de lectura de cartas y la recopilación de informes de espionaje ilegal y caminó el territorio: son públicas sus participaciones en actividad de campaña, en las que incluso fue anunciada como referente en actividades en locales partidarios del PRO. Es decir, todavía levantó un poco más su perfil. 

El nombre de Martinengo en la causa de espionaje fue señalado por el juez a CFK como uno de los nexos políticos de los agentes de inteligencia imputados. “Durante dos horas y medía escuché las explicaciones del juez y la fiscal de la causa en Lomas de Zamora donde se descubrió una real y verdadera asociación ilícita que, como tal, tenía por objeto la comisión de diversos delitos, todos los necesarios para destruir opositores”, relató la vicepresidenta en un video.

Y precisó que en la “trama más escandalosa de la que se tenga memoria en tiempos de democracia” también estuvo involucrada “hasta una alta funcionaria de la unidad presidencial de Mauricio Macri”, en referencia a Martinengo.