La comunidad Growlers que nuclea a los dueños de cervecerías artesanales pidió que no limiten la circulación nocturna a partir de las 23 horas porque afectaría duramente al sector que empezaba lentamente a reactivarse tras pasar varios meses cerrados.
"El argentino que tenga que estar a las 11 después de cenar, es porque arranca a comer a las 8", graficó.
En una entrevista con FM Delta, Martín Casanova sostuvo que
"la medida afecta a un sector que no es el responsable de la expansión de los contagios" en caso de que la voluntad política sea aplicar cierres desde las 23 considerando que no es usual con los argentinos cenar antes de las 22hs.
"Cuando estábamos en cuarentena, como gastronómicos, teníamos que ser coherentes y cerrar. En este caso con reuniones privadas, fiestas clandestinas, el velorio de Maradona, y las actividades políticas impactaron de verdad la salubridad", cuestionó.
Además reclamaron que "todas las medidas deberían ser geolocalizadas" y no generales teniendo en cuenta los distintos escenarios epidemiológicos.
"Cuando haces un decreto muy restrictivo, vas a tener quejas como en el caso de la gastronomía o la temporada en Mar del Plata", concluyó.