El juez federal Alejo Ramos Padilla
dictó el procesamiento de Aldo Eduardo Sánchez, uno de los miembros de la banda del Grupo Buenos Aires que se encontraba prófugo y que fue extraditado desde Panamá. La causa tramita en el juzgado de Dolores dónde se investiga la asociación ilícita que integró, entre otros Marcelo D' Alessio, y a través de la cual
se dedicaban a transferir dinero de origen ilícito al exterior, para reingresarlo como préstamos y de ese modo darle apariencia legítima.
Ramos Padilla había ordenado la detención de Sánchez el 20 de mayo de 2020. Interpol lo buscó y lo detectó en Panamá, donde lo detuvieron el 4 de diciembre pasado. Desde ahí, lo trasladaron a Dolores con el apoyo de los grupos especiales de la Policía Federal Argentina (PFA).
Entre marzo y diciembre de 2018 el Grupo Buenos Aires se utilizó para armar esquemas financieros con miras a colocar fondos de origen ilícito en cuentas offshore.
La primera operación del Grupo Buenos Aires lleva el nombre en el expediente de "Operación Sánchez" y es en la que buscaron colocar nada menos que 500 millones de euros.
La estructura para la operación, según surge de una resolución del Juzgado Federal de Dolores del año pasado, la facilitaba un hombre de nacionalidad dominicana, que era "difícil de ubicar", según dijeron los integrantes de la banda de D'Alessio.
Sánchez fue quien buscó colocar el dinero desde una cuenta del Foreign Finance Bank con sede en las Islas Comoras bajo el nombre de Aldo Sánchez Building and Entertainments.
En 2020 el juez de la causa le había solicitado a la UIF que dispusiera el congelamiento de activos del imputado. Con el dictado del procesamiento Ramos Padilla también ordenó la inhibición general de bienes y le pidió a la Unidad de Información Financiera que mantenga el congelamiento de los activos sobre la figura de Aldo Sánchez.
